Una semana en Malasia y Rins ya tiene claro que la Yamaha es superior a la Honda
Alex Rins empieza con buen pie su nueva andadura en Yamaha. El piloto catalán ha completado tres productivos días de trabajo en Malasia en los que se ha dedicado a seguir conociendo la que será su nueva moto las dos próximas campañas, la YZR-M1, unos test en los que Rins también ha empezado a trabajar en las novedades que la fábrica de Iwata ha preparado para 2024, especialmente en términos de aerodinámica.
A pesar de que su vuelta rápida no fue nada del otro mundo -marcó un 1:57.879 que le situó 16º en la tabla, a 1,1 segundos de Pecco Bagnaia-, el barcelonés mejoró en más de un segundo su registro más rápido del test de Sepang del año pasado, cuando también se estrenaba con otra fábrica japonesa, Honda.
De entrada, el test de Malasia le ha valido a Rins para confirmar que su pierna está prácticamente recuperada al 100% de su grave accidente en Mugello, y después de sumar cinco intensos días entre el Shakedown y el test IRTA, la articulación le ha respondido positivamente: «Solo tuve problemas el primer día del test IRTA. Los dos días de shakedown fueron bien, luego tuve un poco de dolor el primer día de IRTA. Pero el segundo y el tercer día fueron perfectos de nuevo. Puedo pilotar la moto a mi manera, sin dolor, lo que es bueno», valoró el #42.
Rins aseguró en Malasia, antes de irse, que está «bastante contento porque hemos hecho buenos entrenamientos hasta ahora. Nos hemos centrado en probar piezas durante estos cinco días, y es cierto que hemos descuidado una buena puesta a punto. Ha faltado un poco de trabajo de puesta a punto, se trata de mejorar la configuración«.
A la pregunta de cuál está siendo el aspecto que más le está costando asumir de su nueva M1, Rins todavía debe mejorar sustancialmente en el área de la frenada: «Me ha costado un poco frenar la moto, la rueda trasera pierde contacto con el suelo. Hemos perdido un poco de tiempo en ese aspecto. Pero estoy bastante contento porque estamos haciendo un buen trabajo y tenemos un buen grupo de trabajo. Veremos si podemos seguir así y mejorar aún más».
Su compañero de filas, Fabio Quartararo, dijo al cierre del test que el motor 2024 de Yamaha es sensiblemente más potente y rápido que el propulsor del año pasado, una caballería adicional que ahora mismo no pueden aprovechar por el carácter del motor a la salida de las curvas. Sobre estas declaraciones, Rins ha dicho que él «tiene las mismas sensaciones» que su vecino de box, «pero no tan fuertes, porque vengo de una moto diferente y el año pasado tuvimos grandes problemas con la Honda en esa fase».
«Para mí, esta moto es ligeramente mejor en términos de aceleración, pero es cierto que cuando queremos apretar para conseguir un tiempo por vuelta o ritmo de carrera, tenemos más problemas que los demás, por ejemplo en la salida de la curva 14 o en la curva 5″, explica el piloto español.
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Por último, a Rins también le preguntaron por la notable diferencia de velocidad máxima que registró la moto de Fabio (338,5 km/h) respecto a la suya (334,4 km/h), un detalle que no parece importarle tras entender el motivo: «He pensado mucho en ello y he analizado muchos datos. Es porque el sensor de velocidad punta está situado justo en el punto de frenada. Según los datos, se puede ver que Fabio frena entre cinco y siete metros más tarde que yo. Esa es la razón«, sentencia el catalán.
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Tomado de Todocircuito.com
