Conoce el casco de Star Wars para motos: tiene cámara, mucha velocidad y más tecnología – Infobae

No viene de una galaxia muy lejana, pero parece sacado de una. Tiene cámara trasera, proyector frontal, conexión a redes, sistema de navegación y hasta un modo de comunicación en grupo.
El Smart Record Eye KDR-BH2 no es un casco cualquiera. Es un dispositivo diseñado por la firma japonesa Kaedear que lleva a la práctica lo que por años parecía solo una fantasía de ciencia ficción.
La promesa es brindar al motociclista un nivel de conectividad y seguridad sin precedentes, condensando tecnología de alta gama en un accesorio que siempre se ha considerado básico.

Lejos de ser un simple casco decorado con estética futurista, el KDR-BH2 incorpora un sistema de visualización frontal o HUD (head-up display) que proyecta toda la información necesaria directamente sobre la visera. Esto incluye velocidad, indicaciones GPS, notificaciones de llamadas y hasta imágenes en tiempo real de lo que ocurre detrás del conductor.
Con una resolución nítida, un brillo que alcanza los 3.000 nits y una proyección que simula estar a tres metros de distancia, el HUD funciona como una pantalla de 55 pulgadas justo delante de los ojos.
Lo innovador de este sistema es que no requiere de una pantalla física. Todo se proyecta directamente desde el teléfono móvil del usuario y es compatible con CarPlay y Android Auto. Así, se puede acceder a mapas, música o información del tráfico sin apartar la vista del camino.

El dispositivo está pensado para quienes valoran tanto la estética como la funcionalidad, pero sobre todo la seguridad. Ya no será necesario girar la cabeza para mirar el espejo retrovisor, ya que la cámara trasera incluida transmite lo que sucede a espaldas del conductor y también graba continuamente en formato FHD con gran angular y compensación HDR/WDR.
Además, es posible incorporar una cámara delantera (opcional), lo que convierte al casco en un sistema de vigilancia total que captura todo lo que ocurre en ambos sentidos.
La grabación en bucle y la posibilidad de almacenar datos en tarjetas microSD de hasta 64 GB lo transforman en una especie de caja negra para motociclistas.
Otro aspecto que sorprende es su intercomunicador de doble canal, que permite mantener conversaciones con hasta 15 dispositivos mediante red móvil, o hasta 9 mediante Bluetooth tradicional.
Esta función es especialmente útil para recorridos grupales, permitiendo llamadas fluidas sin importar la distancia entre los participantes. También se incluye la posibilidad de conexión a transceptores externos, ampliando aún más las opciones de comunicación.

El control por voz complementa la propuesta de conducción sin manos. No es necesario quitarse los guantes ni tocar pantallas táctiles: todo puede controlarse con comandos hablados o mediante un pequeño control remoto inalámbrico que viene en el kit. Este tipo de interacción busca reducir distracciones y hacer la experiencia más fluida incluso bajo lluvia o en trayectos nocturnos.
El casco es compatible con distintos tipos de diseño, puede adaptarse a cascos integrales, jet o medios. Esto lo hace especialmente útil para motociclistas que poseen varias motos o prefieren cambiar de estilo según el recorrido.
La batería de serie ofrece entre tres y cuatro horas de uso continuo, aunque existe un modelo opcional de 4.000 mA que extiende ese tiempo a más de ocho horas, ideal para largas travesías.
Además de su avanzada tecnología, el KDR-BH2 ha sido pensado con múltiples precauciones de seguridad. Cuenta con certificación IPX66 para resistir salpicaduras y polvo, sensores de luz para ajustar el brillo de manera automática y compatibilidad con gafas en la mayoría de los casos. También posee un sistema de cancelación de ruido y un altavoz de 40 mm que garantiza buena calidad de audio durante los trayectos.
Con un precio estimado de 675 euros, el casco de Kaedear busca consolidarse como una herramienta integral de movilidad conectada. Aún sin fecha de lanzamiento confirmada, ya ha generado interés en comunidades de motociclistas que valoran la innovación sin sacrificar estilo ni seguridad.
El KDR-BH2 no es solo un accesorio, es un paso adelante en la fusión entre la tecnología de consumo y la cultura del motociclismo. Una combinación que, hasta ahora, parecía reservada para las pantallas del cine o las fantasías de un fan de Star Wars.
Tomado de https://news.google.com/