Lorenzo: «Gran piloto son todos los que corren en MotoGP, pero no son campeones»

Ayer domingo, Jorge Lorenzo era el invitado especial de Ernest Riveras, en DAZN, para hablar de una de sus victorias más especiales.

Y de todas, de entre las 47 que llegó a sumar a lo largo de su trayectoria en MotoGP, Lorenzo se queda con la última, la lograda con Ducati en Austria la temporada 2018, por delante de Marc Márquez y Andrea Dovizioso.

El piloto balear se decanta por esa porque fue la última victoria de su carrera, pero seguro que el hecho de que fuese con Ducati también ayuda a hacerla más importante.

No es ningún secreto para nadie que su paso por la casa de Borgo Panigale no fue fácil y Lorenzo también habló sobre eso con Ernest, comenzando por la decisión de cambiar de Yamaha a Ducati:

“Sabía que en Yamaha siempre habría tenido el mejor material, siempre lo tuve, y no tengo ninguna queja al respecto. Pero Rossi estaba allí y era muy fuerte mediáticamente, era difícil competir con él en ese sentido”, explica el balear.

Un hecho que no está reñido con el reconocimiento que siente hacia Valentino como piloto: “Conseguir con 40 o 41 años seguir luchando por ganar carreras en MotoGP tiene un mérito enorme. Nadie hasta ahora lo ha hecho, solo Valentino, y es tremendo”.

Es más, el balear se mostraba seguro de que “si tiene mejores sensaciones con la moto que el año pasado podría volver a ganar carreras”.

Pero evidentemente el éxito mediático de Rossi no fue el único motivo de la decisión, ni el principal. Jorge explica que “quería cambiar, hacer algo que me hiciese levantar por las mañanas con ganas de dar lo máximo de mi”.

Aunque no esconde que seguramente “tendría menos huesos rotos y más victorias” de haber seguido en Yamaha, no se arrepiente y cree que si volviese atrás tomaría la misma decisión.

Y eso que no lo tuvo fácil en Ducati, algo que sabemos todos. En Ducati tenían mucha prisa por ver mejores resultados y más victorias por parte de Lorenzo, lo que propició su marcha. Sin embargo, parece que en parte lo entiende: “No era fácil ver el futuro. Era complicado, siempre me quejaba de lo mismo y los resultados no llegaban. Yo siempre lo tuve claro, pero les faltó tener visión de lo que podía suceder”.

Lorenzo explica que la temporada 2018 no comenzó de la mejor de las maneras, sabía que le faltaba algo en la moto que la hiciese más dulce y que le provocase menos cansancio, y cuando consiguió lo que necesitaba, volvió a ser el piloto fuerte que era.

Sin embargo, a Ducati se la había acabado la paciencia (rápido comparada con la que habían tenido con Dovizioso) y según explica Lorenzo en la entrevista con Ernest, decidieron que “Petrucci también hace séptimo y gana 10 veces menos, en lugar de pensar vamos a darle una moto a Lorenzo, un piloto que ha sido capaz de ganar 3 mundiales”.

En una cosa fue muy claro, y no le faltaba razón: “Gran piloto son todos los pilotos que corren en MotoGP, pero no son campeones, lo somos Valentino, Márquez y yo”.

Por último, además de la prisa de Ducati por obtener buenos resultados y victorias, la regular relación con Andrea Dovizioso seguro tampoco ayudó, aunque Lorenzo asegura que él intentó que fuesen buenos compañeros: “Creía que sus éxitos eran también míos, era bueno que el equipo consiguiese victorias. Estaba contento de que el equipo ganase e iba al podio a celebrarlo. Pero Dovizioso, no sé por qué, quizá porque siempre tuvo esa espinita de no haber conseguido el título de 250 mientras luchaba conmigo, siempre me ha tenido un poco entre ceja y ceja y he sido motivo de ataques mediáticos por su parte”.

Tomado de solomoto.es