Probamos la Kymco Super Dink 350 TCS: un scooter para el carnet A2 cómodo, solvente y con control de tracción, por 5.199 euros

De tamaño generoso, estéticamente resultón y con un motor solvente. Así se presenta el Kymco Super Dink 350 TCS, pero su mayor argumento lo tiene precisamente en el apellido TCS, pues cuenta con control de tracción, el primero en incorporarlo dentro de la marca asiática.

Por lo tanto estamos ante una base conocida, pero que hemos querido probar para ver qué tal le sienta a un scooter con solera en el mercado la última innovación en cuanto a tecnología. Porque más seguridad siempre es mejor.

Kymco Super Dink 350 TCS: renovación tecnológica sin cambios estéticos

Te suena, ¿verdad? El Kymco Super Dink 350 TCS es un viejo conocido. Se estrenó en 2017 y recientemente se ha renovado. Vale, sí, no hay cambios ni por fuera ni por dentro más allá de la inscripción TCS de su guardabarros delantero.

Por lo demás es exactamente el mismo scooter de líneas agresivas y angulosas, con dos grandes faros delanteros circulares separados por una especie de toma de aire falsa justo en la nariz y que no nos acaba de convencer. Lo que sí nos gusta es el frontal a medida que avanzamos hacia el lateral.

Los intermitentes están integrados en forma de punta de flecha sobre el vértice de una capa inferior del carenado, que se superpone sobre la de más arriba y le da un toque sofisticado. En la parte superior hay una gran pantalla transparente que carece de regulación.

Viajando hacia la parte trasera nos encontramos con un asiento realmente generoso y un gran asa para el pasajero que además hace las veces de portabultos. Los pilotos traseros que carecen de tecnología LED y con un diseño demasiado asiático, configurados en forma de rombo con un embellecedor de aspecto metálico y rodeado a su vez de cristal rojo que se extiende hacia los laterales y entre ambos pilotos.

La calidad de los materiales es aceptable. Se nota que hay mucho plástico a modo de embellecedor, sobre todo en el embellecedor de escape y la calidad generial de los plásticos es la que es: ni mucha ni poca.

En lo referente a los espacios de almacenamiento, bajo el asiento tenemos un gran cofre con una pequeña luz LED. En su interior cabe un casco integral en la parte trasera, uno jet delante y algo más en los espacios que quedan. Tras el escudo delantero hay dos guanteras, una a cada lado, con espacio para dejar el móvil, la cartera o los guantes.

No destaca por ser especialmente capaz, pero si hay algo mejorable en este apartado es la calidad de las tapas de las guanteras y sus cierres, bastante endebles en general y, además, sin posibilidad de cerrar con llave. Pasa lo mismo con la tapa del depósito. El tapón sí tiene llave pero la tapa da una sensación poco firme.

Confortable y bien resuelto, aunque con calidades mejorables

Nos ponemos a los mandos del Kymco Super Dink 350 TCS y nos encontramos ante una ergonomía muy bien conseguida. Si bien el Super Dink se concibió como un scooter de tipo GT con ciertos aires deportivos, su posición es muy relajada.

Destaca el asiento, que es realmente ancho y con un buen mullido, además de estar situado a una altura razonable: 810 mm. No es alto, pero sobre todo nos deja llegar bien al suelo gracias a que es bastante estrecho por los laterales. No nos obliga a saltar hacia delante del asiento para poder apoyar los dos pies en el suelo.

Hablando de pies, las plataformas disponibles son amplias, con mucho espacio longitudinal y poca anchura. Para quienes les guste llevar las piernas estiradas hacia delante cuenta con plataformas frontales, aunque quedan bastante cerca. Alguien de más de 170 cm puede sentirse un poco comprimido.

El culo nos hará tope con un escalón lumbar integrado en el asiento y que nos ha resultado muy cómodo. Con el trasero en aquella posición, el manillar queda cerca con una postura general agradable y una sensación de control correcta.

Para las manos tenemos un detalle interesante, porque las dos manetas de freno son regulables. En cambio y como nos ha ocurrido en otros modelos de la marca, los retrovisores quedan demasiado cercanos y nos obligan a desviar la mirada de la carretera más de la cuenta.

El pasajero también dispone de mucho espacio, con un asiento cómodo y muy amplio, las asas que hemos mencionado antes para agarrarse y unas estriberas retráctiles recubiertas con gomas. En su caso debido a la anchura del conjunto sí tendrá que abrirse bastante de piernas pero con una postura confortable.

Los mismos 28,8 CV pero ahora con control de tracción

Ponemos vertical a la Super Dink 350 TCS, quitamos el caballete lateral y arrancamos a golpe de botón. El motor se pone en marcha con una rumorosidad media, igual que las vibraciones (especialmente si la sujetamos en parado activando el freno trasero).

Por delante del manillar nos encontramos con un cuadro de mandos muy convencional y sobre el que se nota el paso de los años. No hay pantalla digital a color ni sistema Noodoe, sino una doble esfera con una pantalla monocromática entre medias con la información típica: temperatura exterior, parciales, consumo, reloj horario… Se nota que la renovación está al caer para uno de los superventas de Kymco.

Nos ponemos en marcha y la entrega de potencia inicial es bastante directa, la conexión entre el puño derecho y la rueda trasera es buena y no hay que esperar a que el motor se revolucione. Si buscamos aceleraciones puras encontraremos una buena entrega, pues no le cuesta nada ganar velocidad.

Estamos hablando de un propulsor monocilíndrico de cuatro tiempos que en contra de lo que dice su denominación cubica 321 cc. A cambio nos ofrece unas cifras de 28,8 CV y 30,8 Nm de par motor. En la práctica se traduce en una entrega de potencia contundente y más que suficiente para acometer cualquier tipo de desplazamiento.

La hemos utilizado tanto en entornos puramente urbanos como para hacer desplazamientos por vías rápidas, y se defiende igual de bien en ambos entornos. En el día a día es un scooter ágil, más de lo que parece, con cierta tendencia a caer rápidamente al interior de las curvas, quizá por la elección de neumáticos (Kenda en medidas 120/80-14 delante y 150/70-13 detrás).

El Super Dink 350 TCS es capaz de circular a alta velocidad sin despeinarse demasiado. A partir de 80 km/h las recuperaciones le cuestan un poco y hay que jugar con la anticipación, pero puede superar velocidades legales de crucero con relativa facilidad, aunque mostrando ya vibraciones y síntomas de que lo estamos sacando de su zona de confort.

A ritmos legales, es un scooter agradable que no vibra en marcha y que se siente cómodo. Las suspensiones tienen un tarado confortable y unido al peso es algo que se nota a la hora de trazar curvas rápidas, con ciertos vaivenes del conjunto. Son una horquilla convencional de 37 mm delante y un coble amortiguador trasero con cinco posiciones de precarga a los que les daríamos un punto más de progresividad porque resultan un tanto secas ante baches súbitos.

A la hora de tirar de frenos y tal y como pasa en otros muchos scooter similares, lo más cómodo (sobre todo si vamos con pasajero) es iniciar o incluso realizar buena parte de las frenadas con el freno trasero. El equipo del Super Dink 350 TCS está compuesto por un disco delantero de 260 mm con una pinza de tres pistones y un disco trasero de 240 mm con una pinza de dos pistones.

Ambos trenes frenan de manera progresiva, aunque en el delantero falta algo de mordiente y progresividad, pues da un tacto un poco esponjoso. En cualquier caso equipa ABS Bosch 9.1 con un tarado bastante conservador, más el trasero. Para el tamaño, peso y prestaciones echamos en falta otro disco delante o en todo caso una frenada más efectiva con un solo disco.

Las piñas de mandos son sencillas pero efectivas. Sin grandes alardes y un funcionamiento y tacto correctos. En el caso de la piña izquierda tenemos en la parte frontal el botón TCS, dedicado exclusivamente a desconectar el control de tracción si es que fuera necesario.

Precisamente el control de tracción es la gran novedad para este 2020 del Kymco Super Dink 350 TCS. Su funcionamiento es imperceptible la mayor parte del tiempo. Y decimos imperceptible no porque haga su trabajo en la sombra, sino porque no es fácil encontrar pérdidas de adherencia en un scooter de estas características.

Sí es cierto que con 28,8 CV estamos ante un scooter potente, pero hay que tener en cuenta que la forma de entregarlos es muy progresiva y que, además, pesa 192 kg. Con estas cifras no es lo habitual que derrape de atrás.

Habiéndolo utilizado en una de las semanas más lluviosas de este invierno, lo cierto es que no ha habido ni una sola ocasión en la que hayamos pensado en la necesidad de este complemento. Como ya hemos defendido muchas veces, nunca está demás todo avance en materia de seguridad, pero sólo hemos conseguido hacer saltar el control de tracción en aquellas situaciones donde lo hemos buscado deliberadamente. Ahora, que con que en toda su vida útil evite una caída, el control de tracción ya estará más que amortizado.

En cuanto a su funcionamiento y seguramente condicionado por lo brusco de las pérdidas de adherencia que hemos provocado, se nota demasiado cómo trabaja. Corta la potencia de manera súbita y sin contemplaciones. Un poco tosco pero efectivo en caso de que se quiera escapar la rueda trasera.

Un maxiscooter que destaca por precio y consumo

En líneas generales el Kymco Super Dink 350 TCS es un scooter de tamaño grande y buenas prestaciones que ofrece mucho a cambio de relativamente poco dinero. Por precio se posiciona contra rivales de menos cilindrada o menos equipados, pero por prestaciones se coloca en la liga de los mayores.

Otro de los grandes puntos a favor del Super Dink 350 TCS es su gran autonomía. Con un depósito de gasolina de 12,5 litros podremos superar tranquilamente la barrera de los de 300 km antes de que se encienda la luz de la reserva, y eso sin tener demasiadas contemplaciones con el puño derecho.

Por supuesto que es un modelo con puntos mejorables. Podría tener mejores acabados, materiales de mejor calidad, hueco para dos cascos bajo el asiento, guateras con cerradura o pantalla regulable, pero en algún sitio tiene que notarse el ajuste de precios.

Por precio, como suele ser habitual en la marca, el Kymco Super Dink 350 TCS es una opción interesante, pues se coloca en el mercado por 5.199 euros en tres opciones de color (Gris Stone, Blanco Puro y Rojo Núcleo).

El Super Dink grande se mide a rivales como el Yamaha XMAX 300 (5.799 euros), Daelim XQ2 300 (3.595 euros) o la nueva Honda Forza 350 (aún sin precio, pero la Forza 300 ya costaba 5.825 euros).

Con respecto a sus rivales japonesas es sensiblemente más barato, y eso en el mercado de los scooter es determinante. No es de extrañar que por eso se vean tantas Kymco Super Dink por la calle. Ahora, el modelo TCS añade el control de tracción para relanzar un producto al que dentro de no demasiado tendría que tocarle relevo.

Kymco Super Dink 350 TCS 2020 – Valoración

Kymco Super Dink 350 TCS 2020 – Ficha técnica

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