En el principio, fueron The Beatles
Un mundo, sin la musica de The Beatles, no es mundo
Hace unos días vi “Yesterday”, una comedia romántica sobre un musico que no sabe lo que tiene, y que en una noche, una vuelta de tuerca del destino le permite hacerse de la fama y la fortuna que tanto añoraba y que tanto se le negaba. Cómo? Fácil. En un mundo en que nadie se acuerda de Los Fabulosos Cuatro, un musico sin gracia se posiciona en los charts con las canciones de The Beatles, que el si recuerda. Película pedorra. La única cosa chida que tuvo esa peli, fue que despertó unas locas ganas de bajar a la sala y escuchar nuevamente la música de los Fab Four, y como se debe: en recalcitrante lp de polyvinylo.
Eso si es una chulada!
Hoy me levante, y todo el día me la he pasado escuchándoles. Todo el día.
Si eres musico, o simplemente te gusta la música, no puedes negar el genio que vive en la música de The Beatles.
Sin ellos, la música actual no se entiende. Ellos fueron el principio de todo. No les dolió la mano para experimentar con todo, con cualquier cosa. Y el resultado de su experimentación se manifestó en una colección de canciones fabulosas, que hoy, a 50 o 60 años de haber sido concebidas, siguen emocionando las orejas y los corazones de quienes las escuchan.
Mi primer recuerdo musical, es “You know my name” ese extravagante lado B de “Let it Be”, recuerdo que un par de años más tarde se perdió en las entretelas de mi cabecita, pero nunca se fue. Ya mas tarde me avente de cabeza en el rock de la mano de KISS y me seguí con las cosas mas duras. Fue después, a mis 20 primaveras , que algo me hizo voltear a esa música que me acompaño (porque así fue) de morrito.
Una tarde que hoy recuerdo teñida de color ambar, escuchamos el álbum rojo y el álbum azul en la casa de Juan Carlos y Paco, amigos de la adolescencia, de Pé a Pá. Mi corazoncito rockero colapsó. Fue un revival bien cabrón. Fue darme cuenta que el soundtrack de mi solitaria niñez lo hicieron John, Paul, George y Ringo.
Que hay en la música que compusieron juntos esos cuatro weyes, que a mas de medio siglo se les sigue venerando? Calidad, Genio, Empatía.
Calidad
Quien se atreva a cuestionar la calidad de la música The Beatles, para empezar tiene que ser músico. Que alguien se atreva a denostar la calidad de las composiciones Beatlescas sólo por que no le gustan, es tan trascendente como el berrinche de un werco lerendo porque no le compraron lo que quería en la visita al supermercado.
Si algo hay en la música de The Beatles, es calidad, sonora y compositiva. Y desde el principio.
Desde “Please, please Me” hasta “Abbey Road”. Desde “I Saw You Standing There” hasta “I Want You (She´s so Heavy)”, la musica de The Beatles le grito a los cuatro vientos “No hay Limites, ni fronteras” todo esta permitido en aras de hacer música. Y si al final suena duro no hay pex. Comenzaron haciendo el rock n roll de cuatro compases, bien básico, pero con harta enjundia. Luego, comenzaron a llegar las influencias: el gospel, el barroco, el jazz, la hierba del demonio, el LSD, y cualquier cosa que les pasara por la cabeza a estos cuatro genios. Su música era el eco de su situación. Y su música nunca dejo de ser grandiosa.
Genio.
Existen extensos tratados de las ocurrentes maneras de The Beatles para consolidar las mariguanas ideas que revoloteaban en sus cabezitas, en música, en canciones. A quien le guste leer, le recomiendo buscar con desespero un libro sacado en México y Latinoamerica por la editorial Indicios. Se llama “el Sonido de Los Beatles” y es la traducción al español de “Here, there and everywhere. My Life Recording the Music of the Beatles” un delicioso diario escrito por Geoff Emerick, el Ingeniero de Sonido responsable de los más ambiciosos albums de la banda. Porque hay que decirlo: desde “Rubber Soul” hasta “Abbey Road”, The Beatles en el estudio de grabación, fueron una exigente máquina de experimentación, para quienes la frase “no se puede” estaba escrita en el papel con que se limpiaban el trasero luego de ir al baño.
John Lennon compuso una canción llamada “Tomorrow Never Knows” y quería que en ella, su voz resonara como la voz del Dalai Lama en la cima del Tibet, en todas direcciones. Así suena en “Revolver”, y esto fue el origen de una cosa llamada “Lezly”, utilizada por la gran mayoría de los tecladistas en los 70’s.
Paul McCartney era de gustos más refinados. El quería que la música de rock fuera considerada arte. Y lo logró. Primero “Yesterday”, una composición hermosa. Luego “For No One”, una doliente canción al amor que se fue, que es elevada al infinito con la amargamente dulce melodía de un corno francés. Y remata en “Sgt. Peppers Lonely Hearts Club Band”, con “She´s Leaving Home”. Musicalmente, No existen fronteras para Sir Paul.
George Harrison era era otra cosa. Desde un principio tuvo que lidiar con el hecho de que la dupla Lennon-McCartney era prolífica y muy celosa. Comenzó a meter sus rolas bien sorderamente, aver si cascaban. Pero “Revolver” abre con un “TaxMan” que es un madrazo en la cara del poder. Bien asestado. Marchoso y elegante. A partir de ahí, nadie puede negar la calidad compositiva de George Harrison.
Y Ringo. Richard Starkey no componía. Musicalmente, fue quien menos aporto a Los Fab Four. Pero sin El, la sinergia que hizo de The Beatles, ser The Beatles…simplemente no existe. “Yellow Submarine” es impensable en la voz de alguien más que Ringo. “Octopus Garden” igual. The Beatles fueron The Beatles a partir de que Ringo fue su baterista.
Empatía
Toda la música que The Beatles hicieron se trataba de algo con que la gente en todo el mundo se identificaba. En un principio fue El Amor: la fortuna de tenerlo o la amargura de carecer de el. Pero a partir de “Rubber Soul” se fueron a aguas mas profundas. “Nowhere Man”, “The Word”, “She Said” te decían que estaba bien estar triste porque no te quería tu novia, pero que había ciertas cositas mas trascendentales a las que no les estábamos haciendo caso. Y te lo decían con música.
Te decían también, que había cositas en tu cotidianeidad que no estaban bien, aunque lo parecieran. Y sutilmente te preguntaban, ahora que lo sabes, que vas a hacer?
Magia
En esos tres aspectos residía la magia de The Beatles. Eso creo yo.
Luego de ellos ha habido centenares de bandas con mayores habilidades musicales. Pero no ha habido una banda que conecte con el colectivo universal como The Beatles conectaron en su momento. Dicho en términos menos rebuscados, no ha existido una banda tan amada y tan venerada como The Beatles.
Hace unos años yo pensaba que nunca existiría una banda igual. Porque pensar en superar el genio, la mistica y el encanto The Beatles parece imposible.
A Dios gracias, me equivoqué.
Existe, actualmente, una banda con esa mística Beatle. Pero hoy no hablaremos de ellas.
Hoy, vayámonos a dormir y soñemos con eternos campos de fresas, con la querida Prudencia, con el Martillo de Plata de Maxwell, con el jardín del pulpo, y con ese algo (que tiene ella) que nos atrae más que nada y nadie. Y acuérdate: Amor es lo único que necesitas.
Tomado de https://elrockescultura.com