Descubre la Honda RS150R que se convirtió en una RC213V
No, no se trata de la última máquina que el campeón Marc Márquez ha estado rodando en los tests de Catalunya. En realidad, es un scooter Honda RS150R inspirado en la Honda de MotoGP RC213V. En el corazón de este espectacular scooter de proporciones épicas está el preparador malasio, ‘Big Wheel Gang‘ (o GTB, Geng Tayer Besar), y el ingeniero jefe de este proyecto, Rudy Norman, asegura que, excepto el bastidor, “poco tiene que ver con la original”.
Basculante monobrazo de VFR800, neumáticos del tamaño de una superbike, frenos Brembo, suspensión totalmente ajustable con una pegatina Ohlins (aunque no estamos seguros de que sean amortiguadores Ohlins USD legítimos) y, por supuesto, alerones en la parte delantera… Esta RS150R se ha convertido en una auténtica moto HRC.
“Mantenemos el chasis intacto para evitar problemas con las autoridades, pero casi todo lo demás se modifica, se sustituye y se construye a medida para adaptarse a lo que es una moto GTB”, dice Norman. “El montaje del basculante me causó muchas noches sin dormir, intentando averiguar cómo encajarlo en el chasis, mantener la geometría y seguir teniendo un buen aspecto. De alguna manera, lo logramos”
A pesar de haber sido construida para un cliente, Rudy dice que tuvieron la oportunidad de probarla en el circuito local de karts de Aylezo y, el piloto malayo Azlan Shah, fue quien la puso a prueba. “Después de un par de vueltas, nos dimos cuenta de que pilotar la réplica GTB RCV era casi diferente a todo lo que habíamos pilotado antes”.
¿Debería HRC considerarlo como su scooter en el paddock de MotoGP?
A pesar de que el motor de 149cc solo rinde 15 CV, esta réplica es un espectáculo para la vista, si se construyen unas cuantas de estas y se ponen a competir en las pistas de karts de Europa, definitivamente nos apuntaríamos a una temporada de carreras. Aunque puede que necesites un gran presupuesto, “construimos la moto por encargo, dependiendo de lo que el cliente quiera y de su presupuesto” dice Rudy y concluye diciendo que “la preparación suele oscilar entre 2.000 y 10.000 euros… ¡El cielo es el límite!”. ¿Quién se anima?
Tomado de solomoto.es