TT Christmas Race 2021 en el Rocco’s Ranch, la fiesta de los pilotos
Fotos: Diego Esperani / Jordi Aymamí
El Rocco’s Ranch es una instalación situada junto al Circuit de Barcelona-Cataluña, con pistas de Flat Track, MX o TT Track entre otras, donde habitualmente muchos pilotos de diferentes especialidades se entrenan durante todo el año.
Regentada por los hermanos Ricky y Ferrán Cardús y su equipo, año tras año mejora sus instalaciones y servicios.
Cada final de temporada se organiza una prueba por equipos, con pequeñas motos de cross de 125 c.c., como las que los pilotos suelen utilizar para entrenar de forma más segura que con motos más potentes.
La competición ya se ha convertido en una clásica y no faltan ni el público, ni una inscripción de lujo, que difícilmente se conseguiría ni siquiera a golpe de talonario. Reunir a campeones del mundo como Toni Bou, Remy Gardner, Pedro Acosta, Pol Espargaró, Maverick Viñales o Ana Carrasco, entre otros, y enfrentarlos en una competición no federada y en una prueba por equipos, se me antoja prácticamente imposible.
Pero las ganas de pasarlo bien en un ambiente fiestero, la seguridad que transmiten estas motos pequeñas, el contacto con el público, la curiosidad de algunos por probar nuevas experiencias (Bou, Fujinami…), de otros por recuperar sensaciones (Pedrosa, Mamola…) y el buen rollo que consiguen los hermanos Cardús y su equipo, hacen de esta prueba el final feliz a la temporada de todos ellos.
Toni Bou, Maverick Viñales, Pol y Aleix Espargaró, Dani Pedrosa, Remy Gardner, Ana Carrasco, Pedro Acosta, Xavi Artigas, Augusto Fernández, Jaume Masiá o Randy Mamola, entre los participantes.
La fórmula
La verdad es que visto lo que vimos en el Rocco´s Ranch uno se plantea si no sería una buena idea hacer de esta carrera, más pensada para el divertimiento de los propios pilotos que como negocio o espectáculo para el público, un espectáculo que llegara a más público. Tal vez así perdería su esencia.
Pero de ser así se debería de cambiar el formato de competición por uno más fácil de seguir para los espectadores. Una carrera por eliminatorias con una gran final, sería algo más fácil de digerir y de poder disfrutar al cien por cien del espectáculo.

La fórmula empleada se basa en una competición por equipos en la que los pilotos (dos por equipo) completan cuatro relevos en total, de cinco vueltas cada uno de ellos.
Un total de 57 equipos, es decir 114 pilotos, en un circuito largo y variado. Ganaron Moreira-Grau.
Con buen criterio y por una cuestión se seguridad, se impone el sentido común a la hora de hacer los relevos y se trata en todo momento de hacer una carrera segura. En este sentido, Ricky Cardús fue muy claro en el briefing advirtiendo que, en caso de ver malas formas por parte de algún piloto durante la carrera, se le expulsaría de forma inmediata.
Aceptando que en este tipo de competición con motos pequeñas el contacto es inevitable, no es aceptable en ningún caso ir a buscar ese contacto, o no tener paciencia a la hora de adelantar a pilotos doblados, en una competición en el que la diferencia de nivel entre los participantes es notable. Y, en cierto modo, ése es parte del encanto y también parte de su posible contradicción: que pilotos aficionados puedan batirse de tú a tú con campeones del mundo.

El reglamento es muy abierto y se limita a tener que montar unos neumáticos determinados (de varias marcas y modelos).
Además de las pequeñas 125, también se permiten las pequeñas Kawasaki de 140 c.c. que se están imponiendo en la parrilla de salida hasta el extremo de que vimos alguna Kawa camuflada como otra marca…
El Circuito
Este año el trazado fue más largo que en otras ocasiones, más variado, con algunos saltos y sin zonas muy rápidas, para evitar posibles contactos o caídas a velocidades elevadas que pudieran causar lesiones.
Los saltos fueron un filtro importante para los pilotos no habituados y un plus donde ganar tiempo para endureros o pilotos de cross. Y más allá de este obstáculo -que marcó bastantes diferencias- a la larga los embotellamientos que se vieron en zonas lentas o a causa de alguna de las muchas caídas, fueron algunos condicionantes en una clasificación que al fin y al cabo tiene una importancia muy relativa.

Más allá de la clasificación, lo bonito de esta carrera fue, además de un ambiente extraordinario, la posibilidad de disfrutar del estilo de conducción tan dispar entre pilotos de diferentes modalidades. La finura y elegancia del joven Moreira, a la postre ganador con todo un veterano como Ángel Grau como compañero, las buenas maneras y ganas de competir de Toni Bou, , los piques de Remy Gardner, la elegancia de Pol Espargaró, o las ganas de todo un veterano de 60 años como Randy Mamola, entre otras historias.
Una carrera con final feliz.
PROTAGONISTAS
Toni Bou:
“Me llamó Pol Espargaró para hacer equipo y no supe decir que no. Me lo he pasado súper bien. Tengo muy buena relación con la gente del Rocco’s Ranch. Me habían dicho de venir en varias ocasiones, pero no encontré el momento, pero este año, al empezar el mundial de trial más tarde, he podido venir. Me dieron algunos consejos como la posición del cuerpo y controlar la derrapada para no perder mucho tiempo, y lo he pasado genial”
Pol Espargaró:
“Normalmente vengo aquí a hacer motocross y flat track. Esto es una fiesta que empezó con Lucas Oliver, pero entonces era más “pachanga” y ahora se hace en plan más serio. Cada vez llevamos motos más preparadas, pero la esencia es la misma: un día de fiesta. El circuito es muy largo, aunque hay muchos inscritos. Las motos corren poco y no hay peligro. Lo hemos pasado genial”
Randy Mamola:
“Vine al Rocco´s Ranch en agosto con un grupo de Motul y poco después, en la prueba de Valencia de MotoGP, le dije a Dani Pedrosa de tomar parte en esta TT Christmas. Hacía 15 años que no hacia una carrera con estas motos pequeñas. Ha sido muy divertido, sigo en forma físicamente, incluso cuando el confinamiento no dejé de entrenar en casa con mi hijo Dakota. Lo hemos pasado muy bien”
Pedro Acosta:
“Ha sido espectacular, muy divertido, la mejor carrera del año. Para carreras más serias ya tenemos MotoGP. Normalmente hago motocross para entrenar, no este tipo de carreras. He venido a pasarlo bien y nos volvemos a casa enteros, que eso es lo importante”
Remy Gardner:
“Ya estuve aquí otros años. El año pasado no tenía una moto muy competitiva y este año dije ¡se van a enterar! Hemos ganado una manga y lo hemos pasado muy bien haciendo equipo con Dakota Mamola. ¡Ahora nos vamos de fiesta, que también es importante!”

El futuro
La cantidad y calidad de los inscritos y lo complicado que resulta la convivencia entre pilotos ‘pro’ y aficionados, son algunos aspectos que la organización quiere replantearse en próximas ediciones.
Charlamos con Ricky Cardús, del equipo del Rocco´s Ranch, sobre ésta y otras cuestiones.
¿Seguirá el TT Christmas con el mismo planteamiento?
“Queremos mantener ese espíritu en el que conviven pilotos profesionales y aficionados, pero estamos estudiando alguna solución para el próximo año para que no haya tantas diferencias de nivel”
¿Cómo se puede solucionar?
“Una posible solución sería hacer, el día anterior a la carrera, una prueba de selección entre los amateurs”
¿Limitar los inscritos?
“Tenemos que estudiarlo, pero no queremos que se queden fuera pilotos como Leon Camier o Pol Tarrés, que este año no han podido participar a pesar de estar interesados”
¿Se ha planteado la posibilidad de cobrar entrada al público?
“Sí, es algo que tenemos que estudiar, pero si cobras entrada hay que invertir mucho dinero en cerrar el circuito, más controles etc. Veremos cómo lo solucionamos”
¿Una carrera solidaria?
“Es una opción. No es ésta una prueba donde se gana dinero, porque tiene muchos gastos y sólo los ingresos de las inscripciones y del bar. Podríamos incluirla entre los actos de ‘La Marató de TV3’. Lo que está claro es que tenemos que ir todos en la misma dirección: organizador, federaciones y pilotos. Ese es nuestro objetivo”
Tomado de solomoto.es