Pilla un babero porque la MV Agusta Superveloce Testalarga demuestra que la deportiva retro de Varese aún podía ser más sexy

Tras un par de días alimentando la curiosidad de la gente con pequeñas fotos publicadas en sus redes sociales, la compañía italiana por fin ha desvelado su nueva one-off, la MV Agusta Superveloce Testalarga.

Un vehículo que rinde homenaje a la moto de carreras con la que Giacomo Agostini compitió en el mundial de 500 cc del año 1973 y con la que celebra, a su vez, la historia de los motores tricilíndricos y su impacto en el mundo de la competición.

MV Agusta Superveloce Testalarga: unos colores únicos que no saldrán a producción

Si algo sabe hacer MV Agusta son motocicletas especiales, y con su nueva one-off no se ha quedado atrás. Con ella no sólo rinde homenaje a una figura de la competición y a su fiel escudera, sino que saca pecho de su historia y de la utilización en competición de los motores con tres cilindros.

Así lo evidencian en el comunicado que acompaña a las fotos de esta espectacular moto: «la configuración de tres cilindros no es algo nuevo para MV Agusta. La historia en competición de MV Agusta cuenta con algunas de sus motos de carreras más importantes y efectivas con motor de tres cilindros en su chasis. Una especialmente digna de recordar es la Testalarga de 1973, una moto que recorrió el mundo ganando carrera tras carrera de la mano del legendario Giacomo Agostini. El nombre, Testalarga, proviene de sus culatas de gran tamaño».

Para recrear una visión moderna de esta moto ganadora, la compañía italiana ha escogido la Superveloce 800 como base. Y a partir de ahí, ha ido decorándola con las señas de identidad de la marca. Lo primero ha sido aplicar los colores que utilizaba la compañía en competición, es decir, el característico rojo y plata, rematándolo con un chasis y unas llantas en dorado.

Tampoco podía faltar el dorsal número tres en sus laterales, un claro guiño que hace referencia a los motores de tres cilindros utilizados por la fábrica de Varese para ganar la mayoría de sus títulos mundiales. Así mismo, vemos como la fábrica italiana ha añadido una serie de agujeros en la zona baja del carenado, al estilo de las máquinas de competición de época, para liberar el calor generado durante las carreras.

Si continuamos con su diseño, en las imágenes también podemos apreciar como se ha sustituido el sillín de serie por uno de ante microperforado, en un color rojo muy vivo con acople monoplaza, aumentando aun más la sensación de deportividad del conjunto.

Mecánicamente no ha cambiado nada respecto a la versión estándar o la edición especial Ago. Sigue utilizando el bloque tricilíndrico de 798 centímetros cúbicos y cuatro tiempos refrigerado por líquido capaz de ofrecer una potencia total de 147 CV a 13.000 rpm y un par máximo de 88 Nm a 10.100 rpm, con el que consigue una velocidad máxima de 240 km/h. La caja de cambios, con tapa transparente, sigue compuesta por una transmisión de seis velocidades con Quickshifter electrónico bidireccional y su peso en seco es de 173 kg.

Completando el conjunto mecánico nos encontramos con los escapes Arrow de tres salidas y recubrimiento cerámico en color negro que la marca ofrece a sus clientes como opción dentro del catálogo de personalización. Pero sin duda, una de las cosas que más miradas arranca es el tapón de aluminio mecanizado con apertura rápida. Éste ha sido asegurado con dos tiras de cuero al más puro estilo ‘old school’.

Respecto a la parte ciclo, el chasis sigue contando con una estructura tubular de acero con placas rediseñadas para mejorar la rigidez torsional e incrementar la capacidad de estrés que puede soportar longitudinalmente. Acompañando nos encontramos una horquilla delantera Marzocchi de 43 mm de diámetro y un amortiguador Sachs (ambos ajustables), junto a frenos Brembo con pinzas radiales monobloque de cuatro pistones sobre discos de 320 mm.

A nivel electrónico, la Testalarga cuenta con un paquete de ayudas que se asienta sobre la plataforma de medición inercial e-Novia desarrollada específicamente para MV Agusta. Con ella despliega un arsenal dotado de ABS con accionamiento en curva (Continental), control de tracción, antipicada, etc. Todo controlado a través de una pantalla TFT de 5,5 pulgadas con conectividad con smartphone a través de la aplicación MV Ride y que permite función mirroring para recibir las indicaciones de GPS.

Pese a todo, MV Agusta no ha desvelado los planes que tiene con esta super moto. Suponemos que se quedará expuesta en el museo que la compañía tiene en su sede de Varese aunque no es descartable que algún cliente con el suficiente poder económico pueda reclamarla. ¿Serás tú el elegido?

Tomado de Motorpasion – Moto