Crónica de Uoho en Madrid: Queda mucho rock and roll

por admin · 24 junio 2022

El músico, compositor y productor Iñaki Antón González, presentaba en directo en Madrid su nueva propuesta artística como Uoho, nombre con el que se le conoce popularmente desde que en la escuela empezara a imitar al personaje de dibujos animados, El Oso Yogui. La cita era en una remozada y rebautizada sala, conocida ahora como Teatro Eslava, en pleno centro de la capital y con el cartel de entradas agotadas colgado unos días antes.

A pesar de ser un día laborable, las expectativas eran máximas, como pudimos comprobar al ver el ambiente en los aledaños del recinto, con muchos seguidores que vestían camisetas de Extremoduro y Platero y Tú, que junto con Inconscientes y Extrechinato, iban a ser el armazón sobre el que se iba a construir un repertorio lleno de grandes éxitos en los que el bilbaíno había participado durante su carrera. Este primer trabajo con su propia voz han decidido titularlo como ‘Interpretaciones – Acto 1’ (y el segundo está en camino).

Uoho declaró hace unos días que la primera vez que había cantado había sido en un estadio, pues recordemos que abrieron el concierto de Guns N’ Roses en el sevillano campo del Betis, el Benito Villamarín. Barcelona fue la siguiente parada y la que nos ocupa era la tercera fecha de la gira, con lo que las sensaciones y las ganas no podían ser mejores.

El concierto arrancó a las 21 horas, con exquisita puntualidad, pues el mismo Uoho nos recordaba que a las 23 horas nos cerraban el chiringuito y no iban a tener tiempo para demasiadas florituras. “Cuestión de principios”, de su opera prima como ‘La inconsciencia de Uoho’, del que se rescataría más tarde “Dentro de una botella”, abría la sesión con un tanto de inseguridad y nerviosismo de la banda, que tras “El último hombre libre”, también de Inconscientes, rápidamente entró en calor al ritmo del rock and roll de «¿Cómo has perdido tú?» de Platero y Tú.

“Ya nos veremos”, el clásico de Barricada que apareció en su última obra de estudio, ‘Flechas cardinales’, y que ha sido la aportación al bonito y merecido homenaje al desaparecido Boni, fue uno de los momentos más emotivos y entrañables.

A medida que pasaba el concierto el grupo se encontraba más a gusto, sintiéndose Uoho muy bien arropado por la base rítmica de Extremoduro, con Miguel Colino al bajo y José Ignacio Cantera a la batería, y completando el combo el organista y pianista Aiert Erkoreka.

Hay que reseñar que la sala hervía de excitación con cada clásico de Platero y Tú, como “Bobo”, el indispensable “Voy a acabar borracho” o el fantástico blues de “Mírame”, como también con los emblemáticos temas de Extremoduro “Salir”, “Puta”, “Sucede” de aquel exitoso ‘Agíla’, o “Autorretrato”, con ese lugar destacado para los teclados.

Uno de los instantes álgidos de la noche fue cuando interpretaron un fragmento del disco ‘Pedrá’, que iba a ser un proyecto independiente de Extremoduro, pero que el sello Dro no lo permitió, y se convirtió en el primer disco de la banda en el que intervino Uoho. Sus cambios de ritmo y la participación del público lo convirtieron en algo especial y muy disfrutable.

Los pipas participaron en una versión del “Aces of Spades” para que Uoho tomara un poco de aire, retomando de nuevo el micro con “En el pulmón”, otra canción de la etapa inconsciente. Como preludio al desenfreno final, volvieron a los terrenos del blues con “Maldita mujer”, aquel corte que cerraba el magnífico trabajo de Platero y Tú ‘Hay poco Rock & Roll’.

Para echar el cierre tiraron de dos himnos como el propio “Hay poco Rock and Roll”, una de las cumbres de Platero y Tú, con ese riff deudor de los australianos AC/DC, y “Ama, ama, ama y ensancha el alma”, ese maravilloso canto al ser humano basado en un poema de Manolo Chinato que incluyó Extremoduro en su álbum ‘Deltoya’ y que retumbó en una sala que la cantaba a voz en grito, como si a los asistentes les fuera la vida en ello. Uoho pidió al público que guardara los teléfonos móviles y que la disfrutaran in situ.

Aunque Iñaki Uoho no tiene el mismo poder de convocatoria que su amigo Robe Iniesta, y su voz es algo más cruda, la pasión y el feeling que le acompañan, junto a un excelente repertorio, nos cautivó y nos ganó para la causa.