Aleix no sabe si podrá correr mañana: «Tengo mucho dolor y está empeorando»
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Aleix Espargaró ha sido uno de los grandes protagonistas del sábado en el Circuito de Silverstone. El de Aprilia arrancó la jornada demostrando la excelente velocidad de su RS-GP en la pista británica liderando el FP3 matinal, convirtiéndose en el máximo favorito para llevarse hoy la pole en el Reino Unido.
Lamentablemente, una espectacular volada en el FP4 cuando sólo llevaba tres vueltas rodando con el neumático duro trasero de Michelin dejó al de Granollers tendido sobre una de las escapatorias de asfalto de Silverstone con evidentes gestos de dolor, siendo trasladado en camilla hasta el vial del circuito, donde pudo incorporarse para subirse a un scooter y poner rumbo al Centro Médico.
Allí, el Dr. Ángel Charte pudo constatar a través de varias radiografías que todos los huesos del mayor de los Espargaró estaban bien, aunque el golpe en su pierna derecha le había provocado una fuerte contusión calcárea que no permitía a Aleix apoyar correctamente el pie derecho para andar.
Magullado y con mucho dolor, el #41 se recuperó a tiempo para dar seis vueltas en la Q2 y sacarse un 1’57.966 de la chistera que, además de superar en dos décimas el récord previo de Marc Márquez, permitía a Aleix clasificarse en la sexta posición de la parrilla del domingo, sólo dos plazas por detrás de su máximo rival en la lucha por el título, el francés Fabio Quartararo, que tendrá que afrontar el hándicap de completar una Long Lap Penalty durante los primeros giros de la carrera.
Tras bajarse de su moto, Aleix y su equipo han decidido anular todos sus compromisos con la prensa para que el piloto español se puede centrar en su rehabilitación durante las próximas horas, empezando con una sesión de crioterapia en la Clínica Móvil que el propio Espargaró compartía en sus redes sociales junto a una fotografía con el siguiente mensaje «Todo bien amigos».
El Aprilia Racing Team ofreció un breve comentario en boca del propio Aleix sobre lo ocurrido hoy en Silverstone: «La caída era lo último que necesitábamos. Me sentía bien sobre la moto, empujando fuerte, y el highside ha sido bastante violento. Tengo mucho dolor y está empeorando, así que junto con el equipo y los médicos, decidimos que lo mejor para mí sería descansar hasta mañana y luego evaluar la situación después del warmup, obviamente haré todo lo posible para estar en la pista, pero como estamos hablando de una parte del cuerpo que está muy estresada durante el pilotaje tendremos que ver si es posible», narra el dorsal #41.
En cualquier caso, muy mal se tendrá que encontrar el español para decidir quedarse en su motorhome el domingo teniendo en cuenta que la lucha por el título de MotoGP está más viva que nunca, consciente de que mañana tiene una buena oportunidad para neutralizar los 21 puntos que le separan de Quartararo en la general.
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De hecho, la presencia de su compañero Maverick Viñales en la primera fila de la parrilla de salida puede ser crucial para que Aleix y él hagan labor de equipo el domingo y compliquen la carrera de un Fabio Quartararo que actualmente no puede apoyarse en ninguno de sus compañeros de Yamaha.
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Tomado de Todocircuito.com
