Una motocicleta nacida para la guerra

Todos los amantes de las dos ruedas alguna vez idealizamos alguna moto icónica, y cada uno tememos nuestras razones. ¿Qué moto clásica te gustaría poseer y montar? ¿Cuáles son tus razones?

Las motos clásicas son bellísimas, y es que si hay algo que entender es que no se trata de un montón de fierros. Cada una de ellas guarda una historia y un sinfín de relatos si las contextualizamos en su época. Una de ellas es la Harley-Davidson WLA, una moto (como titulamos esta nota), ¡nacida para la guerra!

Así damos paso a la historia de la Harley-Davidson WLA “Libertador”.

¿Todos quieren una Harley?

Ser poseedor del rugido americano tiene un valor excepcional, solo basta encender una para entender lo especial que es.

Harley-Davidson comparte algo más que una identidad con sus seguidores, no por nada ha destacado y logrado tal nivel. Algo innegable es que la marca es todo un lifestyle para miles de bikers, por esa razón, hoy realizamos un viaje en el tiempo a 1939, año en que inició la historia de la Harley-Davidson WLA.

Así llegó la Harley-Davidson WLA

El año de 1939 fue crucial en la historia, la segunda Guerra Mundial comenzaría ese año. El 1 de septiembre se dictaba el destino de muchos con la invasión a Polonia por parte de Alemania.  Pero no fue hasta 1941 (año en que los japoneses atacaron la base militar de E.U.A. en Pearl Harbor), que el ejército del país vecino solicitó al fabricante estadounidense de motocicletas fundado en 1903 en Milwaukee, Wisconsin, que equipara a sus oficiales de enlace y a la policía militar con una motocicleta.

En este contexto, las fábricas Harley-Davidson, Indial y Delco probaron diferentes prototipos en los campos de maniobras del Ejército Americano (Fort Knox, Luisiana). El objetivo era presentar un vehículo de dos ruedas para la guerra.

Así llegó la Harley-Davidson WLA, basada en un modelo civil existente, el WL