Crítica de Blind Guardian: The God Machine

por admin · 1 septiembre 2022

Los singles que los alemanes habían ido sacando ya nos habían puesto sobre aviso, pero difícilmente uno podría esperar semejante obra maestra del grupo a estas alturas de su carrera. El año pasado resultó excelente para el heavy metal, con los álbumes de Iron Maiden y Helloween, pero es que este 2022 y ‘The God Machine’ nos han traído posiblemente el mejor disco del Guardián Ciego desde ‘Imaginations From The Other Side’.

Con una renovada dureza y velocidad, sorprenden temas como “Blood of the Elves” o “Deliver Us From Evil”, más cercanos que nunca al speed metal y francamente agresivos. Las guitarras no dan tregua, el grupo va a doscientos por hora y la batería es contundente y tremenda. Hacía mucho que el combo no sonaba tan duro, además de alejarse de sus habituales elementos grandilocuentes. ¡Es que las guitarras de “Damnation” y “Violent Shadows” podrían pasar por thrash metal, demonios!

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Es justo reconocer que “Life Beyond The Spheres” se queda algo justita, compositivamente hablando, pero amigos, cuando te plantan semejante estribillo, tú te callas y haces la vista gorda. Más power metal suena “Architects of Doom”, donde la melodía se apodera del tema. “Let It Be No More” casi resulta necesaria después de tanta matraca, siendo una balada que nos recuerda que cuando se ponen, Blind Guardian son excelentes a la hora de crear composiciones emotivas y delicadas. Cierra el álbum “Destiny”, más cercana a sus últimas obras en desarrollo y estructura, pero un gran tema igualmente.

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Huelga decir que los solos son maravillosos, pero es justo reconocer el tremendo estado de forma de la garganta de Hansi Kürsch, el vocalista hace tal despliegue vocal que solamente podemos temer por su traslación al directo. Os aseguro que al menos en estudio borda tanto las partes melódicas como aquellas que requieren de una mayor agresividad. Decir que está de diez es quedarse corto.

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Me he hartado de soltar alabanzas sobre ‘The God Machine’, pero he dejado lo mejor para el final. “Secrets of the American Gods” es una canción perfecta, simplemente sobresaliente, con un estribillo que afirmo sin miedo es de los mejores que han compuesto nunca los alemanes, y no andan cortos de buenos himnos precisamente. Solamente por este tema ya merecería la pena la escucha del álbum entero. Disco del año, sin lugar a dudas.