Crónica de México Metal Fest: Kreator, W.A.S.P., Cradle of Filth, Jinjer, Dark Funeral, Marduk, Mayhem…
Los grandes festivales en Europa ya son cosa del pasado para el 2022, pero al otro lado del gran charco el último fin de semana de septiembre se llevó a cabo el México Metal Fest, más específicamente, las ediciones V y VI del festival de metal extremo, que estaban planeadas para el 2020 y 2021, y que ahora por fin pudieron ser organizadas en la Expo Guadalupe, cerca de Monterrey, en el estado norteño de Nueva León, donde todavía era verano.
El festival contaba con dos escenarios principales, uno al lado del otro, como por ejemplo ocurre en Graspop, y una tercera escena más pequeña en una sala cubierta del Jardín de la Cerveza.
La primera banda que pude ver fue la polaca Batushka, en la versión de Krzyszt of Drabikowski. La misa negra se desarrolló a plena luz del día, con muchos seguidores coreando en voz alta el nombre de la banda. La liturgia comenzó en silencio, pero no se quedó así mucho tiempo, y como es de costumbre, Drabikowski y los suyos aparecieron como sacerdotes ortodoxos encapuchados y con el rostro tapado. Musicalmente fue un éxito, un set muy solemne.
A las 17:25 llegó el momento para la única banda española del fin de semana con Daeria, que están de gira por México y la noche anterior tocaban en San Luis Potosí. Desgraciadamente para los barceloneses, la asistencia del festival estaba principalmente compuesta de seguidores de metal extremo y thrash, que se habían quedado al sol para asistir al set de la banda alemana de thrash Destruction.
Daeria trajo un set convincente, con varios temas del último álbum que sacaron hace dos años y medio, un set en cual dieron todo con los talentosos y excelentes dos guitarristas, que destacaron al igual que el cantante, Ángel Ortiz.
Los suecos de Dismember vuelven a estar juntos desde hace tres años, luciendo la alineación de los primeros tiempos, incluido Richard Cabeza, y lanzaron un set de principios de la década de los noventa, que fue muy aclamado por los mexicanos, que estaban exultantes. Dismember tocó todos los clásicos de los primeros tres álbumes y en algún momento el cantante, Matti Kärki, pidió a los asistentes que cuando llegaran a casa esa noche fueran amables con sus esposas y no las despellejaran vivas, antes de tocar “Skin Her Alive”, del primer álbum.
Justo antes de que oscureciera, los holandeses de Carach Angren con un batería desconocido, se presentaron en el Trve Stage, lo que supuso su primera actuación en tres meses. La banda de black metal sinfónico tocó una mezcla de temas antiguos y nuevísimos de su último álbum ‘Franckensteina Strataemontanus’, en el que resucita la terrible historia del atribulado teólogo, filósofo y alquimista alemán Johann Conrad Dippel, fuente de inspiración para Mary Shelley y su mundialmente famosa novela ‘Frankenstein’. El líder, Seregor, había dado tanto durante el set que tuvo que vomitar camino al backstage cuando salió del escenario.
La noche arrancó con los chicos de Anima Tempo de la capital CDMX, quienes contaron con una buena afluencia, que llenó gran parte de la sala cubierta donde estuvo el Trve Stage. Inicialmente los chilangos iban a tocar a las dos de la tarde, pero hubo un problema con un vuelo retrasado de un miembro de la banda y sustituyeron a Crypta, que quedó varado en Brasil por problemas de visa entre Brasil y México.
La banda lanzó dos canciones del próximo álbum, ‘Chaos Paradox’, más concretamente «Saeger Equation» y «Digital Heart», en una forma más progresiva y melódica que las canciones de su primer álbum, ‘Caged In Memories’.
Los platos fuertes del primer día fueron las bandas europeas Kreator, Cradle of Filth y Belphegor. Kreator se presentaba con nuevo disco bajo el brazo y un escenario con una serie de muñecos colgantes delante y al lado del telón con la portada de este nuevo álbum. Aquellos que esperaban tener una presentación de ‘Hate Über Alles’ se equivocaron, a excepción de dos temas, el grupo alemán se presentó con un “best of” que abarcó toda la carrera de Kreator, desde los principios a mediados de los años 80, y con una clara participación del bajista Frédéric Leclercq, que lleva ya varios años en la banda. Su actuación fue cuanto menos notable.
Justo antes de «666 – World Divided», del 2020, MillePetrozza reclamó un «wall of death» con una cuenta regresiva en alemán para la audiencia principalmente de habla hispana.
El excelente pero desafortunadamente corto set para un cabeza de cartel terminó con dos pistas de una era pasada, a saber: “Flag of Hate” y «Pleasure to Kill”.
Desde Alemania cruzamos el Canal de La Mancha hasta Inglaterra, que estuvo representada por Dani Filth y sus discípulos internacionales de Cradle of Filth, otro de esos platos fuertes del primer día. Cradle of Filth ofreció un excelente espectáculo, con dos nuevos integrantes, más concretamente la deslumbrante corista y teclista estadounidense Zoe Marie Federoff, y su compatriota Donny Burbage como nuevo guitarrista, que también milita en Aether Realm.
Al igual que con tantas bandas, se sirvió un popurrí de la rica historia de la formación sin disgustar su último disco, lanzado el año pasado.
Inmediatamente después del set del conjunto internacional afincado en Ipswich, el público pudo disfrutar de un breve espectáculo de fuegos artificiales.
Al igual que Kreator, Belphegor había lanzado recientemente un nuevo trabajo, un disco que tardó mucho en llegar, pero que finalmente se convirtió en un trabajo para chuparse los dedos.
En un principio también se lanzó aquí una parte de su trayectoria y fue sólo al final que el público recibió tres temas seguidos del último disco, ‘The Devils’.
El escenario fue decorado para una misa negra con los accesorios necesarios, incluidas cruces invertidas y un soporte de micrófono para el cantante, Helmuth, que me recordó a Behemoth.
Belphegor fue lo mejor del día en lo que a mí respecta, pero eso es, por supuesto, subjetivo.
El segundo día comenzó para mí con un calor abrasador típico de la región de Monterrey y con el sentimiento que había algo más de asistencia.
La primera banda a que asistí fue Brujería, con varios integrantes mexicanos, siendo los cantantes Pinche Peach y Juan Brujo.
Por supuesto que no debían esperarse grandes textos profundos y encuadernados de Brujería, sino incitantes frases de uno de los tres cantantes. El público participó generosamente en el juego. Al final del set lleno de clásicos de Brujería los cantantes exigieron un pogo, mientras que durante “Matando güeros” Pinche Peach deambulaba por el escenario con una falsa cabeza cortada y Juan Brujo lo hacía con su inseparable machete. Momentos después, un peluche del Dr. Simi fue manipulado con el machete y luego arrojado a la multitud.
Sonidos de la jungla africana sonaron a través de la amplificación como intro de Nile, que estuvo a la altura de las expectativas desde el principio con su death metal técnico y brutal.
Los estadounidenses, que se inspiran en la mitología egipcia, interpretaron principalmente canciones de su catálogo anterior y ni una sola pista de su último álbum, ‘Vile Nilotic Rites’, del 2019. Feroces solos de guitarras motivaron a la gente a apoyar la banda de Carolina del Sur.
De los escenarios principales pasé al Trve Stage cubierto para ver por primera vez a la banda internacional Nervosa con su nueva formación, con la cantante gallega Diva Satánica.
Al inicio del set, Diva Satánica tuvo problemas técnicos con su micrófono que duraron la primera mitad de la primera canción, después de que mostrara gruñidos y gritos impresionantes. El show fue tan enérgico que haría palidecer a muchos músicos masculinos. En mi humilde opinión, el cambio de formación fue muy bueno. La batería argentina Nanu Villalba dejó una muy buena impresión, al igual que la bajista Mia Wallace, quien también está activa con Abbath.
Después de un set fuerte y sólido de Asphyx, no fue una tarea fácil para Dark Funeral, y además a plena luz del día, lograr que la audiencia se uniera, pero los suecos lo hicieron con brío.
Como es de costumbre, Dark Funeral subió al escenario con todos los requisitos black metal: cruces invertidas, disfraces antirreligiosos, y, por supuesto, pintura de cadáver. El espectáculo que siguió fue un auténtico show de black metal en la blasfema adoración satánica de Lord Ahriman y sus discípulos, los cuales presentaron dos temas de su último álbum, ‘We Are The Apocalypse’.
La audiencia pudo disfrutar de un solo de batería y del anuncio de que Dark Funeral regresará pronto a México.
Bloodbath, aquí con cuatro miembros de Katatonia y el cantante de Paradise Lost, fueron los siguientes, y lo hicieron de manera impresionante después de que Nick Holmes le pidiera a la producción que atenuara la luz sobre su canica calva. A pesar de que los cinco miembros de Bloodbath dieron lo mejor de sí mismos, la calidad del sonido no estuvo a la altura de las bandas anteriores ese sábado por la tarde.
Justo antes de la penúltima canción, Nick Holmes deseó un feliz cumpleaños a todos los que celebraban su nacimiento el sábado 24 de septiembre, y luego presentó «Cry My Name».
Jinjer fue el bicho raro del domingo con su metal ecléctico, lleno de groove, pero lejos del metal extremo y el thrash que representa el festival. Ningún problema, Jinjer es una banda querida y fueron muy bien recibidos en Monterrey por gran parte de la audiencia. Al igual que la última vez que los vi tocar en vivo en condiciones climáticas muy diferentes, en el Summer Breeze en Alemania, Tatiana estaba vestida de negro y dio todo como el resto de la banda.
El público pudo escuchar una muestra de la historia reciente de los ucranianos, así como una buena cantidad de canciones de su álbum más reciente, ‘Wallflowers’.
Tras la fresca y joven banda Jinjer, llegó el turno de los satanistas de Mayhem que llevan casi 40 años pregonando su mensaje, esta vez en un escenario donde hubo poco humo, que no es la costumbre. La primera parte del espectáculo contó con tres canciones de ‘Daemon’, el trabajo más reciente de los noruegos de Oslo si no recordamos el EP que se lanzó el año pasado. No hubo mucha comunicación con el público, Mayhem dejó que la música hablara y luego lanzó tres temas de un pasado mucho más lejano, más específicamente de su primer álbum, ‘De Mysteriis Dom Sathanas’, de 1994, antes de cerrar con una lectura convincente de su primer EP, ‘Deathcrush’.
La siguiente banda que según lo programado tenía que estar en el escenario era Possessed, pero tuvieron que cancelar su show debido a un procedimiento quirúrgico en el líder, Jeff Becerra. En su lugar, Suffocation tuvo la oportunidad de destrozar figurativamente el escenario después de que ya habían estado en el Trve Stage el día anterior, y extenderlo con total convicción en el segundo día. El cantante, Ricky Myers, que solo ha estado con la banda desde 2019, y el guitarrista con rastas Terrence Hobbs se hicieron con un papel principal durante esta actuación sabrosa y técnica.
La penúltima banda de la velada llegó como muchas otras tantas de Europa, en este caso de Suecia. Habían pasado varios años desde que vi a los black metaleros de Marduk en acción, pero ciertamente no me decepcionaron. Liderada por el fundador, Morgan, también conocido como Patrik Niclas Morgan Håkansson, Monterrey recibió un set lleno de black metal brutal en los últimos minutos del sábado, donde se minaron pocas palabras y, al igual que con Mayhem, la música predominó. Cerraron el capítulo de metal extremo de la VI edición del Mexico Metal Fest para dar paso a W.A.S.P..
Ya había pasado la 1 de la madrugada cuando la última banda de la edición 2022 de MXMF subió al escenario para interpretar una hora de hard rock y heavy metal nostálgico que causó furor en los años ochenta. W.A.S.P. lo hizo con su propio estilo redundante de la mano de Blackie Lawless que, a pesar de sus 66 años, aún sabe cómo manejar al público.
El set abrió con “On Your Knees”, de su disco debut homónimo, y sonó como en aquellos tiempos, tras lo cual éxitos ochenteros volaron entre el público hasta que “I Wanna Be Somedody” cerró el festival.
Las ediciones V y VI se emitieron en un solo festival y fueron un éxito. Varias bandas estuvieron ausentes por razones de visa, mientras que una banda tuvo que cancelar por razones médicas, pero esto se resolvió cuidadosamente con bandas actuando dos veces en diferentes escenarios.
La próxima edición se llevará a cabo el próximo año los días 10 y 11 de noviembre, con varios nombres ya conocidos, incluidos Blind Guardian, Septicflesh e Impaled Nazarene.
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