Prueba MV Agusta F3 800 RR: GlamouRR y ADreNalina

por admin · 3 enero 2023

Los italianos son los reyes absolutos del diseño, como en el mundo de la moto. Si no, ¿quién es capaz de hacer motos deportivas tan absolutamente preciosa como esta MV Agusta F3 800 RR?

Sí, está claro que ejemplos como son las Ducati Panigale, las Aprilia RSV4 y, por supuesto, las MV Agusta F4 y F3, son capaces de aguantar el paso del tiempo como si hubieran sido diseñadas ayer mismo, aunque hayan pasado años. Eso es parte de la magia que, por ejemplo, la gigantesca industria japonesa no puede controlar. Por eso, probar a fondo una moto como esta F3 800 RR es casi un lujo y un deleite para los sentidos. Solamente verla en tu garaje te lleva a despertarte mucho antes de lo que tenía pensado para poder disfrutar de su visión y, por supuesto, de su pilotaje. Si, pilotaje, porque las motos tan sumamente deportivas no solamente se montan, o te das una vuelta, sino que pilota sobre ellas… aunque no lo quieras reconocer. En este caso, además, pudimos disfrutar de la que es prácticamente la “crème de la crème” de la gama llamémosle “supersport” de MV Agusta.

A este respecto es hacer un poco de historia. A principios del 2010 aparecieron los modelos “pequeños” de la gama super sport de MV, que eran las 675 tricilíndricas. Como puedes ver, tenían 75 cm³ más que las 600 japonesas y un cilindro menos, como obligaba el reglamento del Mundial. Lo cierto es que este motor con cotas ultra cortas de 79 × 45,9 mm de diámetro x carrera, crecieron a 79 x 54.3 para subirla a 800 cm³, y así poder aumentar su par y potencia y crear un escalón intermedio entre las, digamos, supersport y la Superbike F4 de 1000 cc. Así, este 800 es algo más alto que la anterior 675, y actualmente ocupa toda la gama media de la marca italo-rusa… que ahora es ítalo-austriaca (como puedes ver en este reportaje pinchando aquí) porque, como sabréis, la parte perteneciente a los millonarios rusos ha sido comprada recientemente por el grupo KTM. El caso es que esta gama MV Agusta 800 tiene un abanico de potencias de 110,140 y, como es nuestro caso en esta prueba, 147 CV. Por eso os comentaba antes que estamos ante la flor y nata de la gama deportiva 800 de la marca, porque básicamente sólo le superaría en tecnología y complementos (que no en potencia) la versión RC, declarando un peso de 165 kilos en seco, frente a los 173 de “nuestra” RR, que a su vez son 8 menos que la versión básica denominada Rosso.

PRUEBA MV AGUSTA F3 800 RR: ¿Y CÓMO ES?

Después de todas las parrafadas que habéis terminado de leer, querréis saber lo más importante. O sea, como es y cómo va esta MV Agusta F3 800 RR.

Bueno, del motor ya os he hablado, un tricilíndrico de 798 cm³ reales con las cotas internas que podéis leer arriba, y una muy elevada compresión de 13,3:1. Por eso es capaz de declarar esos espectaculares 147 CV, la más alta de la gama. Esto supone una relación peso potencia de1,17 kg por CV.

El chasis, como es habitual en la marca y en la industria italiana en general, es un tubular de acero Trellis muy compacto y estrecho, con un par de placas en la parte inferior, al estilo de los doble viga tradicionales, que unen el final del entramado tubular con el motor y el basculante. Esto de la compacidad, que es algo que se da por supuesto las deportivas, tuve la oportunidad de comprobarlo al ver cómo, desmontando la moto, tanto el carenado como cada manguito o pieza está absolutamente integrado sin que sobre casi un sólo milímetro, todo para hacerlo más minimalista y estrecho. Por eso, a pesar de una a ser una moto muy alta (como debe ser una RR) se llega al suelo perfectamente, porque la unión asiento-depósito es muy estrecha y reduce mucho el arco de las piernas.

Hablemos de la amortiguación, que aquí se compone de una recia horquilla Marzocchi 43 mm de diámetro y un buen amortiguador Sachs multirregulable detrás. En cuanto a las novedades puras de este modelo, que por otro lado es muy similar al anterior, tiene el motor aún más aligerado internamente (se refleja en un peso declarado de solamente 52 kilos) con un eje contrarrotante como elemento de equilibrado. Incorpora radiadores bidireccionales con inyectores de gasolina de mayor presión, nuevo escape que en este caso además es un auténtico Akrapovic (todo un signo de identidad para cualquier amante de las motos más “racing”), e incorpora plataforma inercial IMU (que puedes ver lo que es y cómo funciona leyendo este reportaje) y ABS en curva, esta vez firmado por Continental. Como toque final, tienen una nueva pantalla TFT de 5,5 pulgadas.

Bueno, y no olvidemos uno de sus detalles más evidentes y espectaculares, como son los alerones laterales, que sirven para aumentar la estabilidad, sobre todo en recta, al cargar el peso del aire generado por la velocidad en el tren delantero. Así, tiene también nuevos elementos el carenado como la pantalla más alta o un nuevo guardabarros, con deflectores para canalizar el aire a las pinzas y bajar su temperatura de funcionamiento.

Bueno, todo esto se refleja en un precio final de 22.800 € ¿Cara?, Bueno, depende de lo que disfrutes de cada giro acelerador, y de eso vamos a hablar ahora.

PRUEBA MV AGUSTA F3 800 RR: ENTRE LA MODA Y LA TECNOLOGÍA «RACING»

Lo primero que haces cuando vas a recoger una moto como esta MV Agusta es pasar un buen rato mirándole por todos los lados, comprobando la excelente terminación general, el remate de los detalles y hasta el cuidado puesto en las soldaduras o en cada empalme simplemente exquisita, lo que junto con su diseño hacen de esta marca una de las más deseadas por todo motorista… Aunque algunos lo nieguen. Otra cosa es que nuestro dinero alcance para comprarla, pero el deseo siempre existirá.

Te montas y compruebas, como ya te esperas, que su posición es realmente radical con el culo elevado, las estriberas altas y semi manillares bajos. Es decir, que si quieres una moto para viajar, cómoda para montar pasajero y bien acolchada… cómprate otra moto, entre otras cosas porque esta F3 800 RR es estrictamente monoplaza, con una buena tapa (por cierto, basculante con bisagras sin quedarse suelta, en la mayoría de la competencia) en lugar de lo que sería el mínimo asiento trasero, y por supuesto no incorpora estriberas traseras. Las puras deportivas italianas siempre han sido más bien ásperas, algo toscas y exigentes de llevar, y que estamos ante un claro ejemplo. Eso sí, todo trufado con tecnología y electrónica modernas, con una extensa lista de ayudas al pilotaje como son 3 modos de conducción programados más 1 a elegir, en el que además de la entrega de potencia puedes elegir entre los 8 niveles de control de tracción y 4 de control de par. Ideal para poder elegir el freno motor que quieras dependiendo de lo rápida o lenta que sea la zona de curvas (o circuito, que es su medio natural) que vayas a afrontar.

La navegació por el menú electrónico de esta F3 no se me hace fácil, y necesito un par de días para cogerla en truco, pero parte de la culpala tiene la dinámica actual de tener que aprenderte al ajuste electrónico en casi todas las motos de pruebas. No obstante, terminas cogiéndole el truco.

El tacto del motor, hasta que alcanzas el rango medio de revoluciones-es decir, hasta unas 4.000- no es nada contundente ni suave. En las MV nunca lo ha sido porque su aligeramiento interno, entre otras cosas del cigüeñal, consigue que el tacómetro suba de revoluciones como si fuera una 2T de carreras, sacrificando en parte con ello los bajos y medios del motor. Eso si, el algo tosco pero efectivo cambio semiautomático bidireccional ayuda a que llegues a ese régimen, y el chillido de motor se te mete la sangre, eleva tus pulsaciones y sientes como si estuvieras en el mundial de Superbikes con la mejor moto que pudieras imaginar. Como he dicho, no es una moto pensada para los que buscan largas rutas tranquilo ni desde luego largos viajes, aunque por su lado sería capaz puesto que a medio régimen tampoco consume en exceso manteniéndose en el rango de los 7 l a los 100. Otra cosa es si quieres exprimir y sobrepasar las 8.000 revoluciones,9.000 o acercarte a la zona roja… Es decir, conducción o pilotaje deportivo. Ahí es fácil acercarte a los 9 ó 10, y recuerda que su depósito es de 16,5 l.

De todas las maneras, cuando disfrutas de una moto de este calibre, lo que más te sorprende respecto motos más “normales”- y aquí entran muchas deportivas japonesas “de serie”- es la rigidez y efectividad de toda la parte ciclo, junto con la amortiguación de calidad con 125 mm de recorrido la horquilla delantera y sólo 130 el amortiguador trasero, que responde a tus deseos, tus trazadas y lo que quieras hacer con ella prácticamente como si estuvieras conectado tu cerebro. Otra cosa es que tu físico aguante mucho rato con un chasis tan efectivo y un tacto de motor tan poderoso– quizá mejor definir definirlo como demoledor-a partir de medio régimen, que te permite entrar y salir de curvas largas y medias con una efectividad absolutamente demoledora. Realmente, como deportiva radical que es, resulta bastante agotadora y más te conviene estar bien de flexibilidad y tono muscular para soportar el dulce castigo de su pilotaje.

PRUEBA MV AGUSTA F3 800 RR: Y SE TERMINÓ

Hay detalles en las MV Agusta que me gusta especialmente, como son los detalles que parece que te lo has hecho tú en tu casa, o en tu taller con tu mejor mecánico y amigo, preparando tu moto para rodar en circuito o para tu próxima carrera. Por ejemplo, el tacto del acelerador me encanta, sus manetas con excelente tacto y que se doblan por la mitad para evitar que se parten en una caída y su criticado tacto en bajas revoluciones te embarga cuando cambia de tono y tacto para subir como una turbina y catapultarte hacia delante de una forma especial que otras motos no tienen.

Desde luego quizá sea una visión romántica del mundo de las motos deportivas, pero es así. Digamos que motos normales y con una excelente calidad precio hay muchas (sobre todo actualmente), pero motos tan embriagantes y absolutamente preciosas que casi te obligan a pararte delante de un escaparate sólo para verla reflejada… hay muy pocas.

Llegó el doloroso momento de tener que devolvérsela al concesionario, pero desde luego puedo considerarme muy afortunado al poder haberla probado, y espero poder disfrutar de las siguientes. Mezclar glamour con adrenalina es un cóctel especial que sólo puedes disfrutar con motos como esta MV Agusta F3 800 R.