Alarma en BMW: sus pilotos son lentos sobre la nueva M 1000 RR
En BMW no pueden ocultar cierta preocupación tras comprobar los resultados conseguidos por sus pilotos durante los test de pretemporada del WorldSBK que se han celebrado en Jerez y Portimao a lo largo de las dos últimas semanas. Tanto en España como en Portugal, la BMW M 1000 RR no se dejó ver en el top 10 de la clasificación final, y con el arranque de la temporada a la vuelta de la esquina, en la fábrica alemana hay cierto clima de decepción por los tiempos que se han registrado en estos primeros test de 2023, especialmente dentro del box del equipo oficial.
Un piloto satélite, Loris Baz, se encargó de establecer el mejor tiempo para BMW en Jerez y Portimao; el piloto del Bonovo Action BMW Team se marcha del último test celebrado en suelo portugués con una mejor vuelta en 1:40,652 que le situó a 1,6 segundos del mejor crono establecido por Álvaro Bautista, una brecha que lógicamente preocupa al francés, que quizás esperaba más de la renovada M 1000 RR de BMW.
«Definitivamente hemos progresado después de haber tenido muchos pequeños problemas en los dos días de test anteriores», explicó Baz al finalizar los entrenos de Portimao. «Ya hemos tenido suficiente mala suerte, el martes fue especialmente malo, los problemas veían uno detrás de otro. El miércoles dimos un paso en la dirección correcta, me siento mejor con la moto y puedo ir más a mi estilo, pero todavía estamos lejos de los demás», admitió Baz.
El galo agradeció a su equipo todo el trabajo que han llevado a cabo en esta pretemporada, sobre todo en el área de la electrónica de la BMW con «nuevos mapas y settings que hicieron de la noche a la mañana», y ahora cruza los dedos para que todo este duro trabajo «tenga su recompensa» en Australia, sede de la primera ronda del campeonato.
Para su compañero, Garrett Gerloff, la pretemporada tampoco ha sido fácil; el norteamericano finalizó este último test de Portimao a la espalda de Baz, clasificado en la 12ª posición también a 1.6 segundos del mejor tiempo de referencia. Para Gerloff, el de Portugal fue su segundo test sobre la BMW M 1000 RR tras haber competido hasta el año pasado con Yamaha, y aunque igualó los cronos de su vecino de box, tampoco acabó contento con sus sensaciones sobre la M 1000 RR.
«Durante el primer día y todo fue pan comido, resolvimos algunos problemas y todo lo que probamos salió como esperábamos. Pero luego pasó algo, no sé el qué, y tras la pausa del miércoles para comer, perdimos por completo la perspectiva. Fue frustrante, cambiamos muchas cosas, pero no nos llevaban a ningún lado», lamento Gerloff.
Más preocupante es, incluso, la situación que se vive en el seno del ROKiT BMW Motorrad WorldSBK Team, que vio a sus dos pilotos oficiales, Michael Van der Mark y Scott Redding, acabar por detrás de las motos del equipo satélite Bonovo Action en Portimao. Un 13º y un 14º puesto es todo lo que pudo conseguir la dupla de fábrica de BMW, despidiéndose del trazado portugués con una brecha de 1,7 segundos respecto a Álvaro Bautista y afrontando la primera cita de Phillip Island con muchos interrogantes en la cabeza.
En conversación con Speedweek.com, Redding aseguró que la nueva M 1000 RR desarrollada por BMW había dado lugar a «grandes expectativas, pero no se están cumpliendo». El británico afirma que, desde fuera, «la moto se ve espectacular, pero no ha cambiado mucho por dentro», de ahí que estén encontrándose con los mismos problemas del año pasado.
Scott se pregunta «por qué BMW hace algunas cosa de manera diferente», quizás en referencia, por ejemplo, a la electrónica de la moto, que emplea un sistema conjunto desarrollado por BMW y Bosch en lugar de confiar en Magneti Marelli como sí hace el resto de la parrilla.
«A veces tengo la sensación de que estamos tratando de reinventar la rueda, pero no somos buenos en eso«, insiste Scott, que invita a su fábrica a «mantener todo lo más simple posible para estar al mismo nivel que los demás». «Tenemos una electrónica diferente, antes teníamos frenos diferentes, un embrague distinto… hay algunas cosas que tenemos diferentes», explica el de Quedgeley, convencido de que todo esto acaba en diversos «signos de interrogación» dentro del equipo cuando algo no funciona como debería.
Redding ve ciertos paralelismos entre su primer curso en BMW y lo que está sucediendo justo un año después: «El año pasado también la cagamos en Jerez. En Portimao intentamos armar un paquete para el inicio de la temporada. Después de eso, iremos carrera a carrera como hicimos el año pasado. Esperaba que tuviéramos más potencial del que tenemos actualmente. A ver qué nos espera en temperaturas más cálidas o en otras pistas, tal vez hemos encontrado algo en estas áreas», se consuela el piloto de 30 años.
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BMW Motorrad sólo tendrá un cartucho más los días 21 y 21 de febrero antes de arrancar la temporada en Phillip Island el fin de semana del 25 y 26 de febrero. Todos los equipos del campeonato participarán en un test oficial en Australia que será decisivo para realizar los últimos ajustes en las motos.
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Tomado de Todocircuito.com
