Crónica de NOFX en Barcelona: El último baile

por admin · 26 mayo 2023

NOFX

Con el lema más contundente de su carrera: «Cuarenta años. Cuarenta ciudades. Cuarenta canciones», NOFX se despedían en tres fechas, un fin de semana entero, en la Ciudad Condal. Eso significa que éramos la única ciudad del mundo con tres fechas y oficialmente el cierre lo hacían para toda España en la capital catalana. Cada día (viernes, sábado y domingo) tocaban dos discos enteros y algunas sorpresas más. Fat Mike y los suyos pudieron demostrar cuál es su propuesta y su secreto para seguir atrayendo a gente de toda Europa vayan donde vayan.

Nosotros fuimos el sábado, porque tocaban el ‘Punk In Drublic’. Si teníamos que ponernos nostálgicos y explicar batallitas de cuarentones, era el día ideal. Sé de amigos míos y del medio, como Juanlu Herranz, que fue los tres días, y conozco gente de Madrid, como Iago Fernández, que vinieron el domingo. En cada jornada los teloneros variaban, así que vayamos a la noche del sábado. Era un fin de semana con lluvia, y creo que cada día, en algún momento, llovió. Yo me llevé mis ponchos por si acaso.

Blowfuse

El día del ‘Punk In Drublic’ también tocaron el ‘Wolves in Wolves Clothing’ de 2006. Una de cal y una de arena. ¿Quién no conoce el ‘Punk In Drublic’? Yo hasta que no anunciaron el festival en Poble Espanyol no había escuchado el ‘Wolves’ ni ninguna de sus canciones. Los teloneros del sábado eran los locales Blowfuse, Get Dead de San Francisco, los canadienses Comeback Kid, que al día siguiente destrozaron la Sala Nazca de Madrid; y los míticos Lagwagon de Joey Cape, uno de los primeros fichajes del sello Fat Wreck Chords.

Get Dead

Juraría que la primera vez que vi a NOFX fue en la Sala Zeleste en 1995. Era sábado, 25 de febrero, y los teloneros fueron Lagwagon. Ahora soy padre de dos criaturas. Cuando me disponía a salir hacía el Poble Espanyol tuve que irme de urgencias a l’Hospital de la Valld’ Hebrón con la mayor. Todo quedó en un susto, pero pude llegar a Comeback Kid. Fui el hombre más feliz del mundo. Pido disculpas a Get Dead y a Blowfuse. Tenía muchas ganas de verles de nuevo.

Andrew Neufeld y los suyos son una apisonadora que no deja títere con cabeza. Lo que ellos hacen en un escenario es difícil de superar. Aunque son banda de sala, hicieron disfrutar a todos los que allí esperaban a los abuelos del evento. Escucha «Heavy Steps» y me cuentas. Tocaron tres cuartos de hora y nos dejaron con ganas de más. Un auténtico lujo. Luego, puntuales, salieron Lagwagon a reclamar lo suyo. El inicio nos pilló a destiempo, como siempre, haciendo cola ya fuera para pulseras, para comida o para bebida.

Comeback Kid

Joey Cape es otro héroe para los amantes de NOFX y su mundo. Sus Lagwagon han sido siempre un referente y un valor asegurado para los amantes del punk melódico de principios de los noventa. No vi a nadie que no tuviera canas dejar de corear y cantar todas sus canciones. Yo personalmente me quedo con «Violins» y confieso que «May 16» es un temazo, pero siempre me he identificado más con ‘Hoss’, de 1995, y no tanto con ‘Let’s Talk About Feelings’, de 1998.

De hecho, ya estuvieron en 2022 en la presentación Warm Up del Barna N Roll en la segunda sala del Razzmatazz. Vista la reacción y el ambiente creado por el quinteto de Santa Bárbara, creo que el Poble Espanyol ante un evento tan histórico como el que sucedió ya se nos queda pequeño. Esa plaza se ha convertido en la casa grande de HFMN Crew, que tiene en la Sala Estraperlo de Badalona su primera residencia y el lugar donde NOFX ensayaron durante esa semana desde que llegaron de San Diego.

Gracias a Joey y los dos Chris, Jesse y Dave, por la velada. Viendo a Joey con sudadera y cigarrillo en mano me di cuenta que andamos por el mismo estilo de vida. Viva la Costa Oeste.

Lagwagon

Y llegó el momento deseado por todo el mundo. NOFX salían a escena. Extrañamente puntuales, el cuarteto liderado por Cokie The Clown nos ofreció un repertorio que no llegó a las cuarenta canciones prometidas, pero que hizo las delicias de los allí asistentes.

El concierto se dividió en dos partes. La primera fue una hora sin respiro de temazos que empezaron con las dieciocho canciones del ‘Wolves In Wolves Clothing’. Así pues, con las palabras «I’m not here to entertain you» comenzaba la inicial «60%» para seguir con mi preferida, «Seeing Double at the Triple Rock».

No seguían el orden del disco. Y además, intercalaban canciones del ‘Punk In Drublic’ para amenizar y dar coherencia a sus speechs y monólogos entre tema y tema. Me pareció esta vez que habían depurado tanto sus punches humorísticos que me aventuro a decir que Fat Mike es capaz de hacer una gira de stand up o spokenword tras colgar sus hábitos en NOFX.

Fue bonito llegar a la decena de temas y que tocaran unos segundos de «Decline» para parar y decir: “Perdonad, esta canción la tocaremos mañana”. Cuando quisimos darnos cuenta, se tomaron un descanso. La típica media parte para evaluar los daños causados, rememorar que se había acostado la noche anterior a las seis de la mañana y se habían levantado a las nueve para la prueba de sonido, para tomar el té y encarar la segunda parte.

No recordaba que fuera tan bueno el ‘Punk In Drublic’ pese a no tocar el disco entero. Dicen las malas lenguas que fue la peor de las tres noches, pero yo disfruté como el que más. Además, creo que todo el mundo había visto a NOFX con anterioridad. Oportunidades las ha habido gracias a la promotora HFMN en estas cuatro décadas de existencia.

NOFX

Todo lo que aportan y tienen Fat Mike, El Hefe, Eric Melvin y Erik Sandin salió en una sola noche. Los tics, la palabrería, los chistes, las referencias a las drogas, los momentos por los que los recordaremos siempre. Se despidieron con «Reeko» (“It really is that bad / It won’t just go away, the party’s over / It’s past two o’clock, so it’s about time we stopped”) antes de las 2 de la mañana.

NOFX tienen trampa y cartón. Esto es lo que hay, y como buenos humoristas y punkies nos queda la posibilidad que regresen para hacer «un Mötley Crüe».