5 discos de Ozzy Osbourne que son un joya

Ozzy Osbourne, el icónico Príncipe de las Tinieblas, no solo dejó su marca como frontman de Black Sabbath, sino que también construyó una carrera en solitario que definió el heavy metal. Desde su debut explosivo hasta sus trabajos más modernos, sus álbumes en solitario son una mezcla de riffs potentes, letras viscerales y momentos que han marcado generaciones. Como periodista especializado en metal, te traigo los 5 discos esenciales de Ozzy Osbourne como solista, seleccionados por su impacto, calidad musical y amor de los fans.
1. Blizzard of Ozz (1980)
Si hay un disco que puso a Ozzy de nuevo en el mapa tras su salida de Black Sabbath, es este. Blizzard of Ozz es una obra maestra del heavy metal, impulsada por los riffs y solos alucinantes de Randy Rhoads. Canciones como Crazy Train y Mr. Crowley son himnos eternos, y el álbum entero es una explosión de energía cruda. Los fans y críticos lo consideran un pilar del género, y su influencia sigue resonando en bandas actuales. Si no lo has escuchado, empieza aquí.
2. Diary of a Madman (1981)
La segunda entrega de Ozzy con Randy Rhoads es otra joya indiscutible. Diary of a Madman lleva el heavy metal a un nivel más experimental, con temas como Over the Mountain y la épica Diary of a Madman. La química entre Ozzy, Rhoads y el resto de la banda creó un sonido que mezcla intensidad y complejidad. Los fans en redes como X lo celebran por su audacia, y los críticos lo ven como uno de los puntos más altos de su carrera.
3. Bark at the Moon (1983)
Con Jake E. Lee en la guitarra, Bark at the Moon trajo un nuevo sabor a la música de Ozzy. El tema titular es un clásico instantáneo, con su riff feroz y su vibra de película de terror. El disco equilibra la potencia del metal ochentero con melodías más accesibles, como So Tired. Aunque algunos puristas lo debatieron en su momento, hoy es un favorito de los fans y un testimonio de la versatilidad de Ozzy.
4. No More Tears (1991)
En los 90, Ozzy demostró que seguía siendo una fuerza imparable con No More Tears. Este álbum, con Zakk Wylde en la guitarra, combina riffs pesados con una producción más moderna. Canciones como Mama, I’m Coming Home y No More Tears muestran su capacidad para conectar emocionalmente, mientras que Hellraiser mantiene la intensidad. Es uno de sus discos más exitosos comercialmente y una referencia constante en listas de prensa especializada.
5. Ozzmosis (1995)
Ozzmosis es el as bajo la manga de los 90. Con un sonido más pulido y colaboraciones estelares (como Steve Vai y Rick Wakeman), este álbum trajo temas como Perry Mason y I Just Want You, que mezclan el metal con un toque de modernidad. Aunque no tuvo el impacto inmediato de Blizzard, los fans lo han redescubierto con el tiempo, y en plataformas como X se le reconoce como un trabajo infravalorado que captura a un Ozzy en plena evolución.
Por qué estos discos
Estos cinco álbumes representan lo mejor de Ozzy Osbourne como solista, desde la revolución de los 80 con Randy Rhoads hasta su reinvención en los 90. Cada uno tiene su propio carácter, pero todos comparten la esencia de un artista que nunca tuvo miedo de arriesgarse. Son discos que no solo definieron el heavy metal, sino que también conectaron con generaciones de fans por su honestidad y potencia.
Tomado de https://heavymextal.com/feed