El airbag lleva 50 años usándose en los coches. Ahora una marca quiere traerlo a los cascos de moto
Mientras ya hemos podido ver la llegada de airbags paulatinamente en la equipación de motos como chalecos, chaquetas y en el futuro más próximo, en pantalones, nos faltaba por verlo en uno de los elementos de protección más importantes: el casco.
La empresa italiana especializada en la fabricación de cascos Airoh, en colaboración con Autoliv, presentó en el pasado EICMA de Milán el casco en el que están trabajando, con airbag integrado y que promete cambiar las reglas del juego.
El primer casco del mundo con airbag es de Airoh, y promete salvar muchas vidas
A lo largo de los años hemos presenciado cómo se han ido mejorando los equipos de seguridad para los motoristas. El airbag es uno de los elementos más importantes en los últimos tiempos, que empezó siendo utilizado en los Grandes Premios y que llegó de forma paulatina a los usuarios de la calle.
El casco, concebido ya como algo totalmente imprescindible para proteger uno de los puntos más frágiles a la hora de tener un accidente en moto, la cabeza, ha ido mejorando su diseño y materiales con el paso del tiempo. Sin embargo, no habíamos oído nunca hablar del airbag en el casco, hasta ahora.
Airoh, como una de las marcas más importantes en la fabricación de cascos, junto con Autoliv, líder en sistemas de seguridad para coches, llevan unidos desde 2020 para estudiar cómo desarrollar un casco con airbag, y en el EICMA de este año hemos sido testigos del concept que estaría no muy lejos de llegar al mercado.
Tiene aspecto de un casco normal y corriente, pero incluye sensores que disparan un airbag en caso de accidente. La idea pasa por combinar las dos protecciones: la absorción del impacto del propio casco, a la que habría que sumar la absorción blanda que proporciona el airbag.
Con ello, según Airoh, se reduciría sustancialmente la aceleración lineal de la cabeza y el riesgo de lesiones. En el momento en el que fue presentado se hizo inciso en que el casco ya cumplía con los estándares europeos de homologación independientemente del airbag, por lo que verlo en el mercado no será cuestión de mucho tiempo.
En principio, y a pesar de la inclusión del airbag en el casco, mantendría un peso “ligero” en comparación con un casco normal. Para hacer efectivo su uso, en el casco se incluye un generador de gas similar al que se utiliza en el airbag de los coches y otro módulo electrónico que detecta el golpe e inmediatamente dispara el airbag.
En el caso de que el airbag explote, el aire puede ser recargado, ya que el generador de gas se esconde tras una tapa accesible.
En cualquier caso, el casco ya ha sido sometido a diversas pruebas tanto virtuales como físicas. Su llegada podría revolucionar el concepto de seguridad en cascos, tal y como lo hizo en su día con los chalecos y monos. No hay fecha prevista de llegada.
50 años del primer airbag en los coches: ¿y qué pasa en las motos?
Y es que, si en el mundo del coche los airbags llevan casi 50 años, ¿por qué ha tardado tanto en llegar al mundo de las motos? Ni siquiera han llegado al mundo de los cascos, siendo este uno de los pocos y primeros conceptos que apuntan a llegar al mercado.
El primer airbag de la historia se instaló en un Oldsmobile Toronado de 1973, cuando en la II Guerra Mundial, los pilotos se llenaban los trajes de aire para flotar en el agua. En el 52 apareció la primera patente, y se fue perfeccionando bajo el auspicio de General Motors, hasta que en 73, el Toronado fue el primer modelo comercial con airbag, con bolsas tamaño XXL que se llenaban frente a la cabeza, torso y rodillas.
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Tomado de Motorpasion – Moto
