Augusto Fernández: “Me contentaría y mucho con ser la primera KTM en 2023”
Texto: Agustí Nubiola
Flamante campeón mundial de Moto2, Augusto Fernández ha demostrado este año una madurez y una regularidad que le han llevado a obtener el título y a ascender a MotoGP para la próxima temporada.
Él mismo nos cuenta cómo ha vivido este año tan especial y qué espera de 2023.
¿Cuál es tu balance de esta temporada pasada?
-Ha sido el mejor año de mi carrera deportiva, eso por supuesto, pero también ha habido sus altos y bajos, sobre todo a principio de temporada. Pienso que con la experiencia que he cogido a lo largo de todos estos años de correr y con la propia del equipo, hemos podido hacernos con el título.
¿Tu peor momento…?
-Visto ahora, pienso que fue la primera parte de la temporada, más que los fallos del final como la caída de Philip Island. En la primera parte no conseguíamos rematar con buenos resultados, subir al podio y de hecho, hasta Le Mans no llegó mi primera victoria. Todas estas carreras del inicio fueron la parte más dura de la temporada.
¿Qué sentiste cuando cruzaste la línea de meta y te viste campeón del mundo?
-Bueno… el momento fue increíble, claro, pero cuando me avisaron de la caída de Ogura en carrera, me dije un par de veces en mi interior de que ya estaba hecho y al cruzar la meta ya llevaba algunas vueltas sabiendo que sería campeón. Aunque luego me concentré en la carrera porque quería ganarla. Pero sí, al saberme campeón, lo solté todo y me lo fui creyendo poco a poco cuando llegué a la grada con mis fans, luego al llegar la pit-lane y celebrarlo con mi equipo, con mi padre. Poco a poco lo fui asimilando y bueno, todavía estoy en ello (risas).
La aventura de MotoGP

Ya formas parte de MotoGP… La toma de contacto con la GasGas y viendo los tiempos ¿fue mejor de lo que te esperabas?
-Pues sí, la verdad. Me adapté bien, tuve buenas sensaciones con la moto y el equipo hizo un buen trabajo. No tocamos casi nada de la geometría y me centré en la electrónica para entenderla, porque hay muchas más cosas y es diferente. Nos quedamos a 1,6s del mejor tiempo de Luca Marini y a un segundo de las otras KTM, así que puedo decir que fue un buen debut, con las cosas más claras para preparar el invierno y llegar listos para la primera carrera.
Has comentado que te habías centrado en la electrónica. ¿Puedes explicar este punto?
-Sí, básicamente fue entenderla y para ello probamos el control de tracción, el antiwheelie, freno motor, entrega de potencia… Probando cosas para yo poder sentir diferencias entre los cambios y conocer la moto. Al final, lo demás es una moto como otra, en el sentido de que tienes que buscar una buena puesta a punto, pero en MotoGP la electrónica marca la diferencia. Vi que es bastante complejo todo, que me queda mucho trabajo por delante y así seguiremos en los próximos test.
Dijiste que la postura en la moto marca la diferencia…
-Sí, la moto de MotoGP tiene el límite mucho más lejos que una Moto2. También vemos que los pilotos que van rápidos trabajan mucho con el cuerpo. Sobre todo, entender lo que necesita la moto para ir rápido y por si este invierno tengo que cambiar algo en mi estilo, poder hacerlo desde el principio.
¿A qué aspiras el próximo año 2023?
-No sé decirte una posición o un objetivo claro, pero eso también lo hace bonito, el no tener presión en el primer año, ni tener que ir a por un resultado concreto. Me contentaría y mucho con ser la primera KTM. No sé dónde me pondría eso en posiciones, pero este sería mi objetivo.
-Tengo muy buenas referencias en el box de GasGas con Pol Espargaró, y luego, en el equipo de fábrica, están Binder y Miller, que son pilotos con mucha experiencia, y quiero aprender de ellos y estar todo lo delante posible.
Tomado de solomoto.es