De Cero a 100: ¿Se puede frenar en curva
Uno de los principios más arraigados en los cánones del motociclismo es que nunca se debe frenar en curva, pero no necesariamente es así.
La técnica denominada “slow-look-press-roll” es la más extendida entre motociclistas y consiste en disminuir la velocidad, mirar la curva, hacer contramanillar, entrar abierto y cerrar hacia el vértice, y acelerar para salir con velocidad. Esta técnica funciona muy bien y por ello es tan popular, pero no es la única. Todo depende de lo que quieras lograr.
El trail braking o frenado progresivo es una técnica que consiste en aplicar el freno delantero más allá de la entrada de la curva, cuando la moto comienza a inclinarse.

Esta técnica ha adquirido popularidad en el motociclismo deportivo, en carreras o track days, pero puede llevarse a la calle con cualquier tipo de motocicleta o scooter.
La tradicional “slow-look-press-roll” funciona bajo la premisa de que el piloto conoce las curvas que toma, pero si resultan más cerradas de lo esperado puede haber problemas porque no sabremos qué tanto frenar y acelerar si no podemos ver el final del giro.
FRENO DELANTERO
El trail braking es una técnica que se aplica con el freno delantero, ya que frenar con el trasero en curva casi siempre terminará en una caída.
Al accionar la maneta derecha, el freno delantero provoca que el peso de la moto vaya hacia adelante, lo que resulta en la compresión de la horquilla y, por ende, una reducción de la distancia entre ejes. Esto provoca que el vehículo se vuelva inestable en línea recta, pero más susceptible al cambio de dirección.
Al acelerar, el peso se va hacia el tren trasero, lo que extiende la horquilla e incrementa la distancia entre ejes, por lo que la máquina se vuelve más estable en recta.

Este principio físico implica que, con el freno delantero, podemos modificar la geometría de cualquier motocicleta para que se comporte como queremos.
Al disminuir el avance de la moto, el giro se hace más cerrado y controlable. Si en el trayecto de la curva nos topamos con un imprevisto, la disminución progresiva de la velocidad nos dará tiempo para reaccionar. Si el giro es demasiado cerrado o adelante hay una curva más o un obstáculo, estaremos mejor preparados.
LA SALIDA
El frenado progresivo nos ayuda a mantener la tracción de la rueda delantera, lo que disminuye los riesgos y aumenta la precisión en el paso por curva.
Al acelerar le indicamos a la moto que es momento de volver a la posición vertical, algo que puede resultar conflictivo en curvas, porque hacemos al giro más abierto y, si no podemos ver qué hay más adelante, los riesgos de accidente se incrementan.
TACTO
Una frenada súbita o con el freno trasero cuando la moto se inclina en la curva puede ser muy riesgosa: aplicar la fuerza correcta es de vital importancia en esta técnica.
La clave está en aplicar ambos frenos antes de entrar en la curva, pero de forma progresiva y por mayor tiempo. Al entrar, suelta el freno trasero y suavemente aplica el delantero para desacelerar hasta entrar en el vértice. Así, la moto es más fácil de girar hasta ver el final de la curva para, finalmente, acelerar. Si la curva es más cerrada de lo anticipado o hay otra adelante, de antemano estaremos frenando progresivamente y aumentado el control de la motocicleta.

Es importante mencionar que el freno de motor equivale a accionar el freno trasero y con ello se pierde la ventaja de disminuir la distancia entre ejes.
Como en cualquier técnica, la práctica hace al maestro. Puedes ensayar en parado y descubrir qué tanto apretar la maneta. Un consejo es poner atención al click que se escucha en la palanca de freno, el cual indica que se acciona la luz de freno: en ese momento las balatas comienzan a hacer contacto con el disco delantero y la moto, a desacelerar.
Presionar y soltar la maneta derecha progresivamente resulta en agregar y sustraer fuerza en el frenado para controlar el paso por curvas y calcular mejor las salidas.
Te invitamos a practicar y practicar hasta dominar la técnica.

PASO A PASO
- Antes de entrar en la curva, desacelera aplicando ambos frenos con suavidad.
- Observa la curva y ábrete.
- Suelta el freno trasero y continúa accionando el delantero progresivamente.
- Empuja el manillar en dirección de la curva para inclinar la moto con la técnica de contramanillar.
- Cuando la moto se incline, mantén control de la maneta de freno delantero y nota cómo la horquilla se contrae, aumenta la tracción y disminuye la distancia entre ejes.
- Sólo cuando puedas ver claramente el final de la curva acelera para volver a la vertical.
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Tomado de https://solomoto.es/