Calor en moto en verano: soluciones para no cocerte en el intento.

por admin · 10 julio 2023

Un tema recurrente entre los motoristas durante el verano es el calor que se sufre cuando vas bien equipado… Pero eso no es verdad. Con la tecnología actual, no es verdad.

En invierno no importa ir bien equipado, con chaquetas de varias capas de Goretex, Sympatex, forro polar y forros internos de PVC, pero en verano pasa totalmente lo contrario. Te pones una chaqueta convencional de Cordura o cuero, el calor que se alcanza estos días “recalienta” el interior de la chaqueta, que es tu piel. Esa chaqueta no deja evacuar el calor por lo que tu piel se recalienta y comienzas a sudar como si estuvieras en un horno. En estos reportajes puedes ver multitud de complementos perfectos para seguir montando en moto sin cocerte más que un langostino.

Pero la ventaja de la tecnología actual es que ya se han inventado fibras y diseños que permiten que el aire penetre por esa capa externa de la chaqueta (o pantalón, guantes, o lo que sea) y que el mismo viento que recibes al estar en marcha con tu moto produzca una ventilación natural. Así, sobre todo desde principios de este siglo, se han inventado lo que se llaman prendas refrigeradas o ventiladas básicamente, toda la tela externa es una rejilla reforzada con celdillas que permiten la ventilación. En el mundo del cuero no es una solución tan moderno, porque ya existían chaquetas y monos de circuito perforados mucho tiempo antes… Aunque desde luego el cuero no es la mejor prenda para protegerte de la temperatura externa, ya sea calor o frío.

Por supuesto, estas prendas también tienen un forro interno desmontable y aislante por si la temperatura baja, y tienen instaladas todas las protecciones habituales: hombreras, hombreras y espaldera.

En los guantes o botas pasa algo parecido, por lo que básicamente puedes encontrar una equipación totalmente ventilada para los días más calurosos y no dejar de disfrutar de tu moto. Además, también existen complementos como chalecos internos con un gel en su interior que, introducidos en la nevera, te mantienen la temperatura interna baja, o unas piezas que, fijadas a la bocamanga de la chaqueta, consiguen que el aire circule por dentro de la prenda y la temperatura no suba en exceso