Compré una moto usada. He tenido un accidente por no cambiar los neumáticos
Comprar una moto de segunda mano puede ser una gran oportunidad, pero también un riesgo si no se revisan ciertos elementos clave. Entre ellos, los neumáticos merecen una atención especial. No basta con que “tengan dibujo” o no estén visiblemente gastados. La goma envejece, se deforma y pierde agarre con el tiempo, afectando al rendimiento y al comportamiento en marcha.
Para que veáis la importancia de los neumáticos en una moto de segunda mano, os vamos a contar un caso real que nos ocurrió hace un par de semanas durante un curso. Un alumno tuvo una caída con su moto, sin consecuencias pero también sin motivo aparente. El problema vino al analizar sus neumáticos, que eran los que traía la moto al comprarla de segunda mano. Unas gomas de más de cinco años, ya cristalizadas, y con un escalón que le hizo tener una pérdida de adherencia en asfalto mojado.
Por ello es importante que al comprar una moto usada, pongáis neumáticos nuevos a no ser que el vendedor los tenga recién puestos. Los motivos son muchos y variados, y os los vamos a enumerar todos a continuación:
Por qué cambiar los neumáticos al comprar una moto usada
1. El tiempo también pasa factura
Incluso sin rodar, el compuesto del neumático se degrada. A partir de los cuatro o cinco años, la goma empieza a endurecerse, reduciendo su capacidad de tracción y adherencia, sobre todo en mojado.
Para saber su antigüedad, basta mirar el código DOT en el flanco: los cuatro últimos dígitos indican semana y año de fabricación. Un neumático con más de cinco años debería cambiarse, aunque conserve el dibujo intacto.
2. Poco uso, mucho problema
Las motos que se han usado poco o solo para trayectos cortos sufren más de lo que parece. Los continuos ciclos de calentamiento y enfriamiento cristalizan el neumático y reducen su flexibilidad. Por el contrario, una moto que ha hecho trayectos largos mantiene mejor la temperatura y preserva las propiedades de la goma durante más tiempo. Aunque en este caso, estarán más desgastados por el centro y habrá más posibilidades de que aparezca un escalón, como veremos más adelante.
Un neumático “cristalizado” puede parecer nuevo, pero ofrecer un agarre peligrosamente bajo en curvas o frenadas. Hay que fijarse sobre todo en las zonas del dibujo que contactan con el suelo, que es donde aparecen las primeras grietas.
3. Cada conductor deja su huella
Otro factor a considerar es el desgaste irregular. Cada motorista tiene su estilo de conducción, y eso se nota en los neumáticos. Algunos gastan más los flancos, otros el centro, y hay quienes generan pequeños escalones o planos al frenar o tumbar con más frecuencia hacia un lado.
Cuando otro conductor use esa moto, ese desgaste no uniforme puede provocar reacciones inesperadas: caídas bruscas en curva, vibraciones o una sensación de inestabilidad difícil de prever y que puede provocar una caída.
4. Los daños invisibles existen
Golpes contra bordillos, presiones inadecuadas o almacenamiento prolongado también afectan al neumático. A simple vista pueden parecer perfectos, pero las capas internas —especialmente la carcasa— pueden haber perdido resistencia. Un simple bache podría provocar un reventón o una pérdida de aire progresiva.
5. Estrenar neumáticos, estrenar moto
Cambiar los neumáticos al comprar una moto usada no es un gasto, es una inversión en seguridad y disfrute. Una moto con neumáticos nuevos transmite confianza, precisión y control desde el primer kilómetro. Además, te permite elegir un modelo que se adapte mejor a tu estilo de conducción y al tipo de uso que harás.
Nuestra recomendación experta sobre neumáticos:
Antes de lanzarte a disfrutar de tu nueva moto, revisa presiones, equilibrado, desgaste uniforme y fecha de fabricación. Y si hay duda, cámbialos. No hay mejor forma de empezar una nueva etapa sobre dos ruedas que con un juego de neumáticos nuevos, seguros y adaptados a ti.
Tomado de https://soymotero.net/





