Se trata de una revolución en ingeniería donde Jetpack Aviation escribió su propio programa de software en control de vuelo que monitorea y ajusta el empuje, su beneficio del trabajo de año y medio en desarrollarse, es un sistema intuitivo igual al de una motocicleta normal y que estabiliza automáticamente la máquina de vuelo. Despega y aterriza verticalmente desde la mayoría de las superficies en aproximadamente el espacio que ocupa un automóvil y se puede programar para volar de forma autónoma.
Una versión Speeder 2.0 del prototipo será sometida a pruebas más intensivas este verano y otoño, antes de que finalice la construcción. Se espera que las pruebas comiencen a principios de 2022. Para todas sus propias operaciones, incluidas las pruebas futuras, Jetpack llegó a un acuerdo con la compañía Prometheus Fuels, para utilizar el combustible 100 por ciento de carbono neto cero de esa compañía.
Este prototipo también incluirá versiones comerciales para organizaciones militares y de seguridad pública, con compartimentos de almacenamiento para contener retardadores de fuego, personal y equipo médico o pasajeros heridos.
El precio inicial de las versiones para consumidores sería de 381 mil dólares y han comenzado a aceptar pedidos por adelantado.