ESBK Legends, o la fiebre de la competición clásica en España
Nuestro amigos portugueses de Motox.pt, Alberto Pires y Fernando Martins ‘Pedrinho’, nos hacen llegar esta interesante crónica de las carreras de los campeonatos de Clásicas y Legends que se disputaron el circuito de Navarra. Es una buena ocasión para descubrir estas emocionantes y únicas competiciones desde dentro.
‘Una parrilla de salida con 36 motos da fe del éxito de una determinada categoría. Pero cuando Roberto, técnico de La Rioja, me dijo que muchos otros se habían quedado fuera, las dudas que tenía sobre la fuerza y el éxito que está viviendo ESBK Legends en España en estos momentos se desvanecieron por completo’.
Texto: Fernando ‘Pedrinho’
Fotos: Fernando Sotoca y Fernando ‘Pedrinho’
Las ESBK Legends tuvieron honores de escenario mundial, llenando el programa de la prueba del World SBK del Circuito de Navarra que dejó vacante la categoría Supersport 300. Motos que me hicieron soñar durante años y me ofrecieron las mejores sensaciones, ya fuese en una prueba, en competición, o simplemente, en una salida con amigos.
La Ducati 916 de Enrique Fernández (SBK 750 Legends) pasando por la Yamaha FZ750 de Mario Peru (SBK 750 Classics).
“Hay tanta gente con ganas de correr que tenemos que hacer dos carreras”, me dijo Carlos Carreira, el amigable ganador del campeonato del año pasado, un piloto que se inició en competición al mismo tiempo que Alex Crivillé, y que tuvo como compañero en sus primeros pasos al fallecido (¡y muy rápido!) Juan López Mella, como él, natural de Lugo.
La única Kawasaki en la parrilla fue esta hermosa ZX-7R de Mikel Cordero, que reproduce los colores de las motos que Kawasaki Francia ha alineado en varios mundiales, con énfasis en la resistencia y la Superbike.
La fórmula admite cinco categorías:
SBK 750 Legends, que incluye tetracilíndricas de hasta 750 cc y bicilíndricas de hasta 998 cc fabricadas hasta 1995
SSP 600 Legends, que incluye tetracilíndricas de hasta 600 cc y bicilíndricas con cilindrada inferior a 748 cc, producidas hasta 1995
SBK 750 Classic, idéntica a SBK750, pero con año de fabricación hasta 1989
SSP 600 Classic, idéntica a SSP600, pero con año de fabricación hasta 1989
Max-Classic, que incluye modelos de 750 cc a 1.200 cc, producidos hasta 1989 (por ejemplo, Suzuki GSX-R1100 SACS).
Enrique Hernández de Albacete y la Ducati 851 ganaron ambas carreras en Navarra y prometen luchar por el número uno hasta que acabe el campeonato, el próximo noviembre en Jerez de la Frontera.
El reglamento técnico intenta imponer que la línea y las características técnicas sean lo más cercanas a las motos de la época, con limitaciones en cuanto al sistema de frenado (tipo, material y diámetro de los discos), ancho máximo de la llanta trasera, suspensiones y chasis.
El motor, en cambio, permite muchas modificaciones (siempre que se mantenga el aspecto externo), lo mismo ocurre con los carburadores, donde se permiten unidades de guillotina o de compuerta plana.
No se permiten neumáticos lisos, ni slicks rayados a mano, y la gasolina a utilizar debe ser la comercial disponible en cualquier estación de servicio.
Hay bastantes Suzuki GSX-R750 entre las SBK 750 Classics.
Sin embargo, una mirada más cercana al ‘paddock’ permite ver que hay mucha libertad en lo que se puede hacer con las motos, algunas de ellas con motores potenciados por preparadores extranjeros (como el motor de la única ZX-7R 750 en pista, hecho en Inglaterra y que costó decenas de miles de euros) o las 851 y 916 de las que están por delante, que utilizan las manos de ex técnicos y contienen algún material antiguo de fábrica.
“Tras la compra de la moto, que cada vez son más escasas y caras, y cuyo valor puede oscilar entre los 7.000 y los 30.000 euros, hay que añadir 1.000 euros por carrera”, comenta Carlos Carreira.
“La preparación de la moto depende de lo que te quieras gastar, pero algunas motos están aquí con decenas de miles de euros de preparación”, concluye.
“El mantenimiento también es variable, pero sin grandes problemas o caídas que provoquen daños, se debe considerar un valor entre 3.000 y 6.000 euros anuales”.
Guerra abierta entre Clásicas y Legends.
Cuando miramos el reglamento técnico y la falta de control con cierto detalle, Carreira revela que “La RFME ha hecho la vista gorda en el cumplimiento del reglamento técnico, por falta de inspectores y por atraer al mayor número posible de participantes a esta categoría”, dice el piloto gallego.
‘Paddock’ lleno para recordar tiempos pasados
En este aspecto, el campeonato de clásicas de Cataluña es realmente más riguroso, hasta el punto de pedir a los participantes que cumplan en la medida de lo posible con la paleta cromática y los patrocinadores que existían en ese momento. “Es un campeonato aún más exigente y muy controlado a nivel técnico”, confirmó Carlos Carreira.
El gallego Carlos Carreira fue el ganador de la copa del año pasado y lidera este año, cuando solo queda por disputar una de las cinco jornadas.
Y no creáis que esta pandilla es un grupo de ‘cojos’, con canas (si es que aún les queda pelo…), una barriga prominente y muchas arrugas. Con muchos de los pilotos mayores de 56 años en Navarra, Carreira corrió con su Ducati 916 en 1’50”6, poco más de 12 segundos del tiempo de Toprak Razgatlioglu, que ganó la segunda carrera de Superbike en la Yamaha YZF-R1 de fábrica. ¡Es un buen tiempo! Y en Jerez de la Frontera, este tío también corre alrededor del 1’50, por tanto, mejor que las Moto-E y no lejos de las Moto3, lo que da fe de su velocidad.
Las Honda CBR600 tienen su feudo en la Supersport 600, como esta ‘Legend’ del veloz Borja Serrano.
El campeonato es prácticamente una exclusiva de las Ducati 916 y 851. Se dice que algunas incluso tienen algunas cosas más recientes que simplemente el año de fabricación te dejaría prever. “Después de pilotar una 916 entiendes por qué Ducati ganó tantas carreras en el Campeonato del Mundo de Superbikes en aquella época”, me dijo Carlos Carreira. “Esta moto va sobre raíles, a diferencia de la Suzuki GSX-R 750 que tengo, que se retuerce”.
Carlos llegará a la última carrera, en Jerez de la Frontera (14 de noviembre), con once puntos de ventaja sobre Enrique Hernández de Albacete, ganador de las dos carreras en Navarra. Solo en quinto lugar encontraremos la Yamaha YZF750R de José Bienzobas, la primera no italiana, que precede a la única ZX-7R, de Mikel Cordeiro, que replica los colores del Team Kawasaki Francia.
La gente de Lugo no olvidará nunca el talento de Juan López Mella, que un accidente durante un viaje a una carrera nos privó de su compañía.
En las Clásicas, la batalla es entre Yamaha y Suzuki, mientras que en las 600 dominan las Honda CBR600F, con la oposición de algunas Yamaha FZR600.
Francisco Abelleira con la Suzuki GSX-R 750 ‘Classic’ por delante de las ‘Legends’ más modernas.
Y qué pena que no podamos tener un trofeo ibérico que pueda llevar a los pocos aficionados portugueses a los clásicas a disfrutar de un ‘paddock’ lleno de motos y con la posibilidad de encontrar uno o más oponentes para una lucha constante en cada ronda. Sin embargo, en una conversación con un funcionario de la FMP, nos dijeron que la Federación Española no está muy interesada en este sentido, ya que hay alguna complicación burocrática en cuanto a licencias y seguros.
Prácticamente desaparecidas, las primeras Honda CBR600F encuentran en esta fórmula una vuelta a la vida en competición, como la del malagueño Manuel Gómez.
Si tienes la oportunidad y te gustan las motos deportivas derivadas de serie de los años ochenta y noventa, no te pierdas las carreras de la ESBK Legends Cup of Speed. La próxima, que cierra la temporada, tendrá lugar en Jerez de la Frontera el 14 de noviembre.
Carburadores muy, muy valiosos, en la GSX-R750 de Pedro Piqueras.
Tomado de solomoto.es
