La KTM 890 Duke R estrena nuevos colores en 2022 para el mismo concepto de naked radical, por 13.049 euros
KTM ha sacado renovado este 2022 una de sus motos más radicales, la 890 Duke R. Esta naked, bautizada como ‘superbisturí’ por su rapidísima geometría de dirección, estrena nueva imagen inspirada en su hermana mayor, la KTM 1290 Super Duke.
El resto de cualidades que le hacen diferenciarse de la competencia siguen intactas, ya sea su propulsor bicilíndrico en paralelo de 799 cc y 121 CV o su bajísimo peso de 169 kg. Tampoco se ha dejado atrás su tecnología, contando con ABS en curvas, control de tracción y medición inercial 6D.
KTM Duke 890 R: nueva imagen heredada de su hermana mayor
KTM ha puesto al día una de sus motos más queridas por el público, se trata de la KTM Duke 890 R. La versión más radical de la naked de media cilindrada ha recibido pequeños cambios en su exterior para seguir compitiendo de tú a tú con rivales como la Aprilia Tuono V4 o la Yamaha MT-09.
Sin embargo, pese a la actualización estética que ha sufrido, no ha dejado de utilizar alguna de sus mejores bazas respecto a la competencia como su motor. Éste sigue siendo un propulsor bicilíndrico en paralelo de 799 centímetros cúbicos con el que es capaz de desarrollar 121 CV de potencia y 99 Nm de par motor.
Su parte ciclo, tampoco se queda atrás. Como decíamos en la entradilla, este modelo se le conoce como el ‘superbisturí’ por su rapidísima geometría de dirección. Gracias al diseño autoportante de su parte ciclo y a unas suspensiones WP APEX regulables se siente igual de bien en tramos revirados y puertos de montaña que en circuito, a la vez que ofrece más potencia, más par motor y una agilidad superior.
Pero a tanta potencia hay que ponerle freno, por eso los de Mattighofen echaron mano de dos pinzas monobloque Brembo Stylema mordidas por unos generosos discos de 320 mm en la rueda delantera que se combinan con una bomba Brembo MCS ajustable, logrando que se detenga con la misma rapidez y precisión que ataca los ápices de las curvas. Para sus llantas confía en unos neumáticos Michelin Power Cup 2, que le proporcionan un buen agarre en cualquier condición meteorológica.
En cuanto a equipamiento electrónico, la KTM Duke 890 R presume de utilizar los sistemas de ABS y el MTC (control de tracción de la motocicleta) en curvas, con una unidad de medición inercial 6D que no sólo detecta los movimientos laterales (balanceo) hacia delante y hacia atrás (cabeceo) de la moto, sino también la rotación de la moto sobre su eje vertical (guiñada). Esto se traduce en una gestión integral del control de tracción, lograda mediante el uso de un sensor de control de deslizamiento de las ruedas y un sensor de control del ángulo de inclinación.
Tampoco faltan los modos de conducción, que en este caso están divididos entre rain, street, sport, y el modo opcional track, garantizando la total personalización de la moto por parte del piloto, con nueve niveles de ajuste de deslizamiento del control de tracción, activación/desactivación del sistema anti-wheelie y el ajuste adicional del control del acelerador.
La novedad del modelo 2022 está en su exterior y es que la KTM 890 Duke R se presenta ahora en un lujoso acabado en pintura mate. Bautizado como «Atlantic Blue», el color recuerda al utilizado en la KTM 1290 Super Duke R, añadiéndole mayor presencia y haciendo honor al lema ready to race de la marca. Tampoco podía faltar el característico tono naranja en el chasis de la moto, sello de la compañía para diferenciar a los modelos R del resto de la gama.
La KTM 890 Duke R 2022 llegará a los concesionarios autorizados a partir de febrero por un precio que arranca en los 13.049 euros. Un precio que se podrá ver incrementado si echamos mano a la completísima gama de piezas KTM PowerParts especialmente diseñadas para personalizar e intensificar aún más esta moto.
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