Wottan Storm-R125 Sport 2022. Prueba y opinión

El recién llegado Wottan Storm-R125 Sport se posiciona dentro de la marca como el scooter 125 más caro y avanzado por encima del Wottan Storm estándar y el más equipado Storm-T gracias a sus mejores prestaciones y equipamiento.

La nueva propuesta de Wottan Motor busca ‘hacer pupa’ a ciertos modelos de este segmento compatible con el carnet A1 y el carnet de coche (B+3 años) como son sobre todo el Yamaha XMAX 125 y el Honda Forza 125, pero también todas las versiones del Peugeot Pulsion 125, todos ellos con precios notablemente más elevados. En las mismas cifras se encuentran opciones como el SYM Joymax Z+ 125 o el KYMCO X-Town CT 125, modelos con los que el Wottan se puede medir de tú a tú con solvencia en ciertos aspectos. El Mitt 125 GT-Max es el modelo que más baja su precio en este segmento, aunque su lista de equipamiento y prestaciones también queda lejos de la competencia.

Este scooter 125 se presenta como un pasito más allá respecto a la ya conocida familia Storm de la marca. Lo primero que puede llamar tu atención es la estética. Ya por fuera resulta ser no sólo un interesante cambio de rumbo dentro de la marca sino un soplo de aire fresco al segmento del scooter. Nuevos aires, con líneas sencillas y sin estridencias, pero que aportan una nueva identidad a esta familia. A ello ayuda su doble faro delantero que recuerda a ciertas motos deportivas (dime si no te recuerda a las antiguas Honda CBR600RR o incluso a las actuales Panigale V4…). Y si miramos desde atrás este Wottan Storm-R125 Sport, el conjunto del faro trasero nos deja sin palabras. Otro detalle deportivo lo vemos también en el escape que muestra descaradamente una doble salida o el porta-matrícula anclado al lateral que libera el colín haciendo un perfil extremadamente afilado. Los acabados en carbono o el parabrisas ahumado resaltan aún más esa deportividad, sobre todo en la opción de color rojo, aunque combinan igualmente bien en las otras elegantes opciones que son el blanco perla, el gris marengo y el azul night blue. En todas ellas, las líneas son muy limpias, con los intermitentes integrados.

El Wottan Storm-R125 Sport también aporta una gran diferencia respecto a sus hermanas al montar un propulsor monocilíndrico de 125 cc que, en esta ocasión, evoluciona gracias a la instalación de un sistema de refrigeración líquida y 4 válvulas que logra mejores prestaciones. Se queda en 12,5 cv de potencia, ya bastante más cerca del límite de los 15 cv para el carnet A1. El consumo declarado es de 2,9 litros a los 100 km mientras que su depósito alberga 10 litros de combustible.

En la parte ciclo, el Wottan Storm-R también se diferencia al contar con unas suspensiones de mejor calidad, sobre todo por la horquilla invertida (convencionales en el resto de la gama). También detrás promete mejor comportamiento gracias a una doble amortiguación con depósito de gas independiente con ajuste de precarga.

La frenada es otro de los campos en los que la marca española ha querido dar un impulso, ya que, aunque se mantiene un solo disco delantero, la pinza es de anclaje radial con 4 pistones, a lo que hay que añadir el ABS (el resto de la familia sólo tienen frenada combinada, aunque el antibloqueo sólo lo aplica a la rueda delantera), lo que repercute en una mayor seguridad. Si a esto le añadimos una llanta delantera de 14″ (trasera de 13″) y un peso en vacío de sólo 160 kg (176 kg en orden de marcha), el carácter deportivo de este Wottan Storm-R125 Sport es mucho más evidente.

Además de un conjunto de luces full-LED, se le ha instalado un sistema de llave inteligente, con la que puedes desbloquear la dirección y arrancar cuando estás a un radio de menos de 2 metros. Además, dispones de una pantalla TFT en la instrumentación, puerto USB y manetas de freno regulables. Otro punto positivo y funcional de este nuevo modelo es que puedes aprovechar un gran hueco bajo el asiento donde caben un casco integral y un casco jet además de otras dos guanteras delanteras para pequeños objetos. Es cierto que un casco deportivo (más alargados, con spoiler, etc) a lo mejor puede ser excesivo, pero es cuestión de probarlo).

Después de haber probado los anteriores Storm (estándar y Storm-T), teníamos ganas de ver cómo ha evolucionado la marca para ofrecer un escalón más alto de este modelo. En lo primero que nos fijamos es en el motor, ahora refrigerado por líquido y con culata de 4 válculas. Fue encontrarnos con el primer semáforo en rojo y no pudimos resistirnos a hacer una prueba de aceleración. La sorpresa fue muy buena ya que prácticamente en un abrir y cerrar de ojos, nos plantamos en velocidades por encima de lo legal en ámbito urbano. El peculiar rugido del motor nos acompaña de manera muy progresiva, algo en lo que ayuda el recorrido de puño del acelerador, quizá un tanto excesivo para los que estamos acostumbrados a una configuración con un recorrido más corto y directo.

En marcha, el mullido y las dimensiones del asiento nos permiten una gran comodidad. Sin embargo, a la hora de detenernos, nos damos cuenta de que la anchura de este asiento es muy generosa, lo cual por otro lado hace que sea un poco más difícil acceder al suelo. Aun así, basta con adelantarte ligeramente hacia delante para llegar incluso con los dos pies al suelo. Esto sólo lo notarás si mides menos de 170 cm de alto más o menos. En cuanto a la posición de conducción, hay que decir que tenemos un triángulo ergonómico bastante convencional y neutral. El manillar no es muy ancho, pero su grandísimo ángulo de giro nos permite serpentear por el tráfico de la ciudad con agilidad. Tenemos una viga central que nos limita el espacio para apoyar los pies, aunque de sobra para cualquiera que no sea un big-foot. En parado, cabe destacar que viene de serie con el caballete central (¡muy fácil de montar!) además de la ‘pata de cabra’ lateral. Las dimensiones compactas del conjunto hace que nos veamos muy cerca del manillar, teniendo una sensación de gran control en todo momento y pudiendo ‘jugar’ con tu posición sobre el asiento para adaptarte según tus gustos. Además, otro punto positivo es que podemos regular las manetas a nuestro gusto.

Un detalle que me gustó mucho al salir a autovía es la pantalla parabrisas, que además de ser ahumada, es regulable en altura fácilmente subiéndola o bajándola sólo con una mano incluso en marcha.

Durante la prueba del Wottan Storm-R125 Sport tuvimos un magnífico día para ir en moto, con un sol de justicia que caía sobre tierras levantinas y bajo esas condiciones, la nueva pantalla TFT a color nos permite ver toda la información con claridad en los dos modos de visualización disponibles. Por pedir que no quede así que con un plus de brillo y con unos dígitos y letras más grandes (aparte del de la velocidad, que es más que suficiente), la visualización ya sería perfecta.

En cuanto a la parte ciclo, donde Wottan Motor ha querido marcar la diferencia respecto a lo que conocíamos previamente en su catálogo, el comportamiento de las suspensiones son muy correctas. Por un lado, la horquilla nos ofrece un tarado que nos da bastante estabilidad y prioriza la comodidad. En el tren trasero, el nuevo conjunto de doble suspensión nos aporta un plus de rigidez cuando circulamos de manera más dinámica, quizá demasiada en su configuración estándar para una circulación por ciudad, pero con la posibilidad de ajustar su precarga a nuestro gusto y necesidades. Le buscas las ‘cosquillas’ al scooter intentando ponerlo en apuros exigiéndole agilidad y estabilidad y, sinceramente, sorprende el gran equilibrio que consigue en ambos apartados.

Por otro lado, los frenos responden con gran firmeza como cabe esperar de un tren delantero con una pinza de anclaje radial y cuatro pistones. El tacto no es tan directo como en una moto deportiva y precisamente es un punto destacable, dosificable para un uso urbano y eficaz cuando tiras fuerte en un uso deportivo o en una frenada de emergencia. El ABS está muy bien configurado… pero sólo para la rueda delantera. Esperamos que en las siguientes evoluciones ya lo traiga también en la rueda trasera, ya que ahora mismo si frenamos a tope con la maneta izquierda, la bloqueamos. Unas gomas de mejor calidad seguramente ayudarían a ganar confianza y a acompañar al resto de la parte ciclo. Los CST que trae no es que hagan un mal papel, pero quizá están orientados a la durabilidad por encima del rendimiento. ¿A lo mejor cabe sugerir una edición especial con los Continental ContiScoot que tan bien le vinieron a aquella Wottan Storm Limited Edition 125 de pasadas temporadas…?