Agostini: “Es aterrador ver a los camiones del ejército, llevándose los ataúdes”
Italia ha registrado casi 60.000 casos de coronavirus, con más de 5.000 muertes, más que cualquier otro país.
Giacomo Agostini lo está viviendo desde el mismo epicentro de la epidemia, en Bérgamo. Ayer fue entrevistado por el canal italiano SkySport.it. Así lo vive ‘Ago’:
“Es terrible”, dijo Agostini. A pesar de que Bérgamo, la ciudad donde vive (nació en Brescia), está en la zona de Italia más afectada por la pandemia, “decidí regresar a Bérgamo y permanecer bajo ‘arresto domiciliario’ porque aquí es donde he vivido durante muchos años y todas mis cosas están aquí. No quería irme”.
Sin embargo, es consciente de que “la situación es muy crítica… se me hace un nudo en la garganta por la noche, cuando escucho pasar las sirenas. Es una situación muy triste, especialmente en Bérgamo, que es el epicentro”.
El campeón italiano contó que “es aterrador ver como los camiones del ejército se llevan los ataúdes… nunca hubiéramos pensado vivir una situación como ésta en 2020”.
A sus 77 años, ‘Ago’ sabe que está entre las personas de riesgo elevado, por lo que admite tener “un poco de miedo, dado el sufrimiento que sienten los enfermos, la forma en que mueren… Pero también tengo confianza, porque me he encerrado. Respeto las reglas, y todos deben respetarlas”.
Todos debemos sacrificarnos
A pesar de lo duro que es todo, piensa que todo irá bien: “Es un gran sacrificio, pero si todos lo hacemos juntos, saldremos adelante”.
Cuando se le preguntó sobre aquellos que continúan burlando las indicaciones del gobierno italiano de no ir a parques o la playa, el 15 veces campeón mundial se enfurece:
“¡Son unos estúpidos! No importa si dicen ‘estoy solo, así que no pasa nada’. ¡Estás solo porque alguien, a diferencia de ti, respeta las reglas! ¡No creo que sea precisamente correcto!”, dice un molesto Giacomo. “Cada uno de nosotros debe hacer un sacrificio personal. Solo si permanecemos unidos ganaremos esta guerra”.
Evidentemente, Agostini sabe que aún no se sabe cuándo empezará el Mundial de MotoGP, dada la magnitud de la pandemia:
“Tenemos que entender que esta es una desgracia inconcebible: nunca habría pensado, dado el nivel de medicina y tecnología actuales, que un virus podría ponernos de rodillas. Podremos vencerlo, pero por ahora solo vemos muertos, todos los días. Es una gran pena”, dijo con pesar.
“Saldremos de eso, pero pasará mucho tiempo, porque cuando esto pase no podremos volver inmediatamente a las viejas costumbres. En un Gran Premio u otros eventos deportivos, no podemos pensar en reunir a decenas de miles de personas, porque el mundo está en crisis, no solo Italia”.
Porque, aunque la gente empiece a curarse, aún deberemos tomar muchas precauciones:
“Este es el gran problema: incluso cuando las infecciones comienzan a disminuir, todavía habrá personas enfermas, por lo que tendremos que esperar no solo a que la transmisión se detenga, sino a que todos se curen”.
La inactividad afectará a todos los pilotos, en especial en las primeras carreras:
“Todos estarán un poco menos en forma al principio: en lugar de dar vueltas en 1’30, darán vueltas en 1’31, pero seguirán ganando los mejores”.
Tomado de solomoto.es
