Harley-Davidson, solo para motos: la decisión para convertirla en la verdadera líder

Harley-Davidson efectuará un giro estratégico y crucial para reforzar su posición en el mercado: se apartará de las llamadas políticas «Woke» para centrarse en lo que siempre supo hacer mejor y destacarse: la fabricación de motos. 

Esta decisión, que se implementa desde abril, busca volver a los principios fundamentales que han definido a la compañía durante más de un siglo. Woke puede resultar desconocido para muchos, pero es lo que le quitó -de alguna manera- la exclusividad en el mundo de las dos ruedas, por lo que las expectativas ahora son muy altas.

Un cambio de rumbo hacia las raíces, la clave

En los últimos años, la firma norteamericana ha enfrentado múltiples desafíos que han puesto a prueba su resiliencia y capacidad de adaptación. Entre estos, las mencionadas políticas Woke han sido un punto de controversia, ya que implican en muchos casos la adopción de medidas basadas en la Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI). Esto se encuentra concebido por algunos sectores como una imposición que afecta la esencia y operatividad de las empresas.

Además, ni siquiera responde a un pedido específico de alguien, ya que para las autoridades de Harley-Davidson, estas políticas no han proporcionado los beneficios esperados. En lugar de mejorar el ambiente laboral o aumentar la cohesión entre los empleados, implicó inconvenientes que afectaron tanto su funcionamiento interno como su percepción pública. Ante esta realidad, la decisión de hacer un cambio real ya está tomada.

¿Qué significa abandonar las políticas Woke?

La estrategia de alejarse de estas políticas refleja una clara intención de volver a su núcleo: la fabricación y promoción de motos de alta calidad. En un comunicado reciente, la compañía enfatizó que durante más de 120 años su misión fue acercar la alegría del motociclismo a todos, sin distinciones de ningún tipo. 

Asimismo, el rector de Harley-Davidson, subraya su compromiso de dar la bienvenida a todos los motociclistas, independientemente de su origen o creencias. En este contexto, se reiteró la prioridad de concentrarse en las necesidades y deseos de sus clientes, al mismo tiempo que se evitará la distracción con políticas que, al fin y al cabo, no aportan un valor directo a la experiencia del cliente ni al desarrollo de la marca.

Repercusiones de la decisión de Harley-Davidson

La medida ha generado un debate significativo en los Estados Unidos. Mientras que algunos ven en la misma un paso hacia la reafirmación de la identidad tradicional de Harley-Davidson, otros consideran que implica un retroceso en términos de progreso social. Sin embargo, para la marca, este cambio representa una oportunidad para reenfocar sus esfuerzos en lo que mejor saben hacer: construir motocicletas que inspiren libertad y aventura.

Desde la empresa, a su vez, han dejado claro que su objetivo no es dividir a la comunidad, sino fortalecerla. Al alejarse de las políticas Woke, busca eliminar las distracciones internas y externas para enfocarse en mejorar sus productos y servicios. Esto último es justamente lo que posibilitará que cada motocicleta que salga de sus fábricas sea un reflejo de la calidad y la pasión característica.

Al fin y al cabo, el público en general no puede evidenciar los cambios internos de Harley-Davidson, pero sí sus resultados con el transcurso de los meses. Pese a que ya transcurrieron más de 120 años desde su surgimiento, emanar la esencia que la llevaron al lugar que ocupa en la actualidad es más que necesario.

Nació en 1995 y los fierros son una de sus principales pasiones. Periodista, licenciado en comunicación y especialista en marketing digital, integra desde 2022 el staff de MotorDigitalPress y colabora con la estrategia de contenidos en www.autotest.com.ar, www.lamoto.com.ar y www.transportemundial.com.ar.