La Voge RR500S llega para poner patas arriba segmento de las deportivas de media cilindrada
Durante años, más bien décadas, el segmento de las deportivas de media cilindrada parecía condenado al olvido, atrapado entre las pequeñas utilitarias y las grandes superbikes. Pero todo cambió cuando Kawasaki decidió recuperar el espíritu de las cuatro cilindros de 400 cc, tan populares en los 80 y 90, con la ZX-4RR. Desde entonces las alternativas van creciendo con nuevos modelos.
El último fabricante en mostrar sus nuevas armas es Voge, la marca del gigante Loncin, que acaba de presentar en China la nueva RR500S, una deportiva equipada con un motor de 475 cc y cuatro cilindros en línea. Las cifras llaman la atención por sí solas: 76 CV a 12.500 rpm (corta a 14.000) y 219 km/h de velocidad punta declarada.
Hay que tener en cuenta, para quien no conozca la marca, que Voge no es una recién llegada. Loncin lleva años colaborando con BMW en la producción de motores y scooters, y ahora mismo tienen en el mercado motos como la DS900X que han tenido una gran aceptación por parte de los usuarios.
En este caso, la RR500S no entra en un segmento tan deseado, pues parece que las deportivas no están en su punto más álgido, pero intentará coger su parte del pastel.

Como buena deportiva de media cilindrada, lo mejor de la Voge RR500S llega en la parte alta del cuentavueltas
Entrando un poco más en detalles sobre el motor de la RR500S, nos encontramos con 16 válvulas con balancines tipo finger follower, cigüeñal forjado y tratamiento DLC para algunas piezas internas. Todo pensado para soportar los regímenes de giro que exige una mecánica tan “apretada”.
El par máximo, 47 Nm a 11.000 rpm, llega tarde en el cuenta vueltas, sí, pero según la marca el 80% ya está disponible a partir de las 5.000 rpm. Eso promete un motor que, sin perder nervio arriba, también resulta utilizable en el día a día.
El conjunto se completa con un chasis tubular de acero, basculante de aluminio fundido, una horquilla invertida y una distancia entre ejes de 1.385 mm, con reparto de pesos 50/50. En cuanto a los frenos, Nissin firma las pinzas de cuatro pistones y, en el apartado electrónico, encontramos ABS y control de tracción. Además, Voge ya prepara una versión más avanzada equipada con ABS en curva, sensores de presión de neumáticos y escape de titanio.

En cuanto al precio, es sorprendente ver como en China se ha anunciado entre lo que serían 3.500 y 3.900 euros, una cifra que simplemente es inalcanzable en Europa donde, de llegar, lo hará con un precio competitivo como sucede con todos los modelos de la marca, pero que será sensiblemente superior por todo lo que conlleva.
Y esto nos lleva a la última pregunta: ¿Veremos esta moto rodando por nuestras carreteras? Sin confirmación oficial por el momento, las informaciones que llegan desde China apuntan a que sí. ¿Cuándo? Eso es más difícil de saber por el momento…
Tomado de https://soymotero.net/